Los bonos se estabilizaron, pero la Bolsa no halla alivio

El índice Merval de Bolsas y Mercados Argentinos (ByMA) volvió a cerrar en baja ayer, la sexta en las últimas 7 ruedas de negocios, y quedó en el nivel de precios más bajo de los últimos 9 meses. Los bonos de la deuda argentina en el exterior, en cambio, insinuaron un rebote que, aunque tenue, puso fin a la escalada de la tasa de riesgo país.

El nuevo ajuste en la valuación de las empresas argentinas volvió a tener epicentro en Wall Street donde los ADR locales retrocedieron entre 1,5 y 6 %. Ese lastre, que evidencia la desconfianza que la economía local genera ahora entre los inversores extranjeros, condicionó la operatoria de la plaza accionaria local, que llegó a hundirse casi 5%. Finalmente retrocedió un 2,8%.

Luego se inició un proceso de recomposiciones parciales que no varió la tendencia general de la jornada pero permitió que algunos papeles cierren el día con mejoras (caso Comercial del Plata y Grupo Supervielle, que ganaron 6 y 3,5%, respectivamente). Pero las caídas volvieron a ser amplia mayoría y superaron en varios casos al 5% (-8,2% Distribuidora de Gas Cuyana; -7,7% Grupo Financiero Valores; - 7,5% Mirgor, -7% Edenor y -6% Transener, entre otros).

La cuota de alivio llegó con las señales de estabilización que entregaron los bonos de la deuda externa que cotizan en el exterior y, en lo peor de la jornada, habían llegado a rendir arriba del 10%, como en el caso del Discount. “Muy buena reversión de bonos. Linda señal. ¿Será un punto de inflexión? Esperemos algo de respiro”, se ilusionó el analista financiero Diego Martínez Burzaco.

“La renta fija también fue castigada y los rendimientos están entre 4,8 y 9%, en niveles máximos de la Presidencia de Macri”, apuntó la consultora Portfolio Personal, que considera a estos niveles de precios como “un buen punto de entrada a los bonos en dólares de la parte corta y media de la curva dado que no vemos un escenario de default,”, afirman.

El repunte quedó reflejado en el cambio de tendencia de la tasa de riesgo país, que había llegado a tocar un máximo de 624 puntos básicos antes de ceder hasta 607 puntos.