Ordenan la prisión preventiva de Correa en Ecuador
El exlíder vive en Bélgica; es por el secuestro de un opositor
QUITO (Reuters).– La Corte Nacional de Justicia de Ecuador ordenó ayer la prisión preventiva del expresidente Rafael Correa y envió un pedido de captura a Interpol para su extradición desde Bélgica, donde reside, por su presunta participación en el intento de secuestro de un opositor en 2012. La jueza explicó que Correa incumplió la orden de presentarse desde el 2 de julio cada 15 días en Quito como medida preventiva del proceso judicial.
QUITO.– La Corte Nacional de Justicia (CNJ) de Ecuador ordenó ayer la prisión preventiva del expresidente Rafael Correa y envió un pedido de captura a Interpol para su extradición desde Bélgica, donde reside, por su presunta participación en el secuestro del exlegislador Fernando Balda, en 2012.
La jueza de la CNJ Daniela Camacho aceptó el pedido del fiscal general, Paúl Pérez, que solicitó la detención de Correa para que sea extraditado a Ecuador y sea sometido a prisión preventiva por no haberse presentado anteayer en la Secretaría de la Corte, en Quito, como debía hacerlo. En cambio, el expresidente se presentó ante el consulado ecuatoriano en Bélgica.
El 18 de junio pasado, la Justicia vinculó a Correa en la investigación por el secuestro de Balda, que ocurrió en 2012 en Bogotá. Ese día determinó que el expresidente debía presentarse cada 15 días ante la Corte como medida preventiva del proceso judicial.
El abogado de Correa, Caupolicán Ochoa, adelantó que el exmandatario apelará la decisión.
Balda era un duro crítico del gobierno del entonces presidente Correa, a cuyo régimen acusaba de corrupción, mientras que el mandatario lo señalaba como autor de una presunta trama para derrocarlo.
Cuando las tensiones crecieron, Balda se refugió en Colombia, donde desconocidos intentaron secuestrarlo en agosto de 2012, pero se salvó a última hora por la intervención de un grupo de taxistas que alertaron a la policía y neutralizaron al vehículo al cual habían subido.
Las investigaciones judiciales en Colombia determinaron que tres agentes de inteligencia de la policía ecuatoriana habían contratado a delincuentes comunes, ahora en prisión, para secuestrar a Balda.
En este caso están vinculados también el exdirector de inteligencia de la policía Fausto Tamayo y el exsecretario nacional de inteligencia Pablo Romero.
Varias veces Correa dijo en Twitter que no sabía por qué lo involucraban en el caso y lo calificó como una persecución llevada a cabo por las autoridades ecuatorianas para encarcelarlo y apartarlo de la política.
Correa, que dejó el poder en mayo del año pasado, está enfrentado con el actual presidente, Lenín Moreno, que en la campaña electoral era considerado como su delfín.
Tras conocer la decisión judicial, Correa escribió en Twitter: “Balda ya anunciaba en noviembre que se venían procesos judiciales que me pondrían orden de captura de Interpol. ¿Adivino o parte de un complot? Hagan sus apuestas. En las próximas horas enviaré un video por redes. ¡Hasta la victoria siempre!”.
Por su parte, Balda dijo: “Lo que ha sucedido [ayer] es la consecuencia de los actos del expresidente. Primero cometió un delito penal como es el secuestro... y segundo incumplió la medida dictada por una jueza competente”.
Añadió que “se empezó a hacer justicia de una manera ejemplar y la decisión de no acudir al llamado de la jueza lo convirtió en un prófugo”.
Los simpatizantes de Correa denunciaron que se trata de una persecución política, por lo que el Movimiento Revolución Ciudadana convocó para mañana a una marcha nacional en apoyo al expresidente.