Una fiesta donde el cine se cruza con el escenario
LABIOS NEGROS MUY BUENA. AUTORAS: Laura Coton, María Rosa Pfeiffer, Patricia Suárez. INTÉRPRETES: Claudio Pazos, Francisco Pesqueira, Claudia Pisanu. MÚSICA ORIGINAL: Rony Keselman. ARTES VISUALES: Lucio Bazzalo. luces: Matías Canony, Carlo Argento. DIRECCIÓN Y COREOGRAFÍA: Carlo Argento. sala: La Comedia, Rodríguez Peña 1062. FUNCIONES: Lunes, a las 21. DURACIÓN: 80 minutos.
Dos mundos muy distintos van cruzándose y retroalimentándose en la nueva experiencia teatral del grupo Carne de Crítica: el cine y la política. Anclada en el período 1950-1956 la trama de Labios negros muestra a tres actores que se desempeñan como extras en diferentes películas argentinas durante las dos presidencias de Juan Domingo Perón. Hasta llegan a vivir el momento en el que la Revolución Libertadora elaboró listas negras que incluían los nombres de valiosos actores.
Delita, Herminda y Adalberto son intérpretes que se conocieron durante el rodaje de La cabalgata del circo, en 1945, y desde entonces recorren los estudios de filmación en busca de un papel que los proyecte con fuerza en la pantalla grande. Entre ellos la relación tiene sus picos de inestabilidad. Delita y Herminda no solo compiten por lograr un espacio en la ficción más destacada, sino que, en muchas oportunidades, se enfrentan debido a sus opuestas posiciones políticas. Adalberto es más ingenuo, enamoradizo y su deambular por el mundo del arte lo obliga a aceptar múltiples fracasos y hasta lo hace con entereza.
Dividida en cuatro grandes escenas, en las que el universo social de la época aparece muy marcado, las autoras Laura Coton, María Rosa Pfeiffer y Patricia Suárez conciben una dramaturgia de estructura singular en la que, además, dan cabida a momentos musicales y coreográficos. Ellas diseñan unos personajes muy entrañables que no solo despiertan interés por el presente en el que se desarrollan, sino porque poseen un pasado que permite completarlos de manera conmovedora. Las autoras logran, también, repasar una filmografía de época (La guerra gaucha, Dios se lo pague, Las aguas bajan turbias, La casa del ángel, entre otras) de la que extractan momentos memorables y rinden homenaje a grandes figuras del cine y el teatro nacional.
Desde la dirección, Carlo Argento construye una experiencia muy sólida que busca respetar cierto estilo de actuación de aquellos años. En esta propuesta la comedia y el drama se entrecruzan notablemente. El humor se impone con fuerza pero también resulta un escape necesario para más de una situación dolorosa que repasan los protagonistas de esta historia. Claudio Pazos (Herminda), Francisco Pesqueira (Adalberto) y Claudia Pisanu (Delita), magnífica intérprete que se suma en este proyecto a Carne de crítica, consiguen aportarles un vuelo muy atractivo a sus personajes. Llevan a esas criaturas a un nivel de delirio insospechado. Hay mucha profundidad en sus caracterizaciones y a la vez demuestran un sincero cariño por ese mundo que recrean, lo que hace que la propuesta general adquiera mayor valor escénico.