La narración oral, en su modo más poético y sensible
conciertorecuerdo
★ ★ ★ ★ muy buena. autor, intérprete y director: Diego Brizuela. luces: Valeria Junquera. video: Marcelo Lupis. vestuario: Peta Acevedo, Diego Brizuela. producción musical: Alejandro Castellani. colaboración coreográfica: Manuco Firmani, Kuly Gómez. asistentes: Vivi Vázquez, Manuco Firmani. sala: El Camarín de las Musas, Mario Bravo 960. funciones: domingos, a las 19. duración: 60 minutos.
Actor, bailarín, director del grupo Babel Orkesta, Diego Brizuela da forma a esta experiencia unipersonal inspirándose en el poema La casa de cartón y madera, del escritor bonaerense Osvaldo Bossi y en creaciones musicales del cantante venezolano Simón Díaz y propias. En el espectáculo el relato cruza ficción y reali- dad y no deja reconocer el límite entre una y otra. Porque las construcciones e imágenes de Bossi están entrelazadas con recuerdos personales del artista. El resultado es una mixtura de situaciones tan potentes como entrañables.
Brizuela cuenta la historia de un niño dentro de su grupo familiar, en un ambiente provinciano, a veces hostil; otras encantador. A medida que crece y se desarrolla su universo va despegándose de la inocencia y eso le posibilita reencontrarse con una personalidad más madura, reflexiva y hasta confrontativa. El paisaje por el que deambula se cuela por momentos, pintando unas estampas que resultan muy agradables para el espectador. Entre algunos tramos de la narración el intérprete completa o ejemplifica su discurso con pequeños fragmentos musicales con fuerte impronta popular.
Conciertorecuerdo tiene el encanto de ciertas narraciones orales. Esas que rescatan una leyenda y la devuelven convertida en un pequeño evento, puro y casi mágico. Diego Brizuela relata siguiendo un estilo muy personal. Cada frase tiene una entonación particular y se engarza con otra a través de unas pausas que posibilitan un tiempo de escucha que hace que el público pueda transformarla en una imagen poética, casi siempre muy apacible.
Es que el valor de esas pequeñas historias que va hilvanando fue elaborado, seguramente, a través de una investigación muy exhaustiva, no solo a la hora de consolidar una interesante estructura dramática sino por la forma en que esta es recreada por el cuerpo o a la voz. Con mucha sutileza se describen aquí personajes y momentos sumamente sensibles. El cuento no está exento de gracia, picardía, humor.
Una historia de vida que rescata del pasado momentos muy elocuentes y los trae al presente con libertad, de manera apasionada.