LA NACION

De madre coraje a villana

La mujer buscaba “protegerlo­s” de su exmarido, condenado por maltrato; la acusan de sustracció­n de menores

- Silvia Pisani

Polémica en España: huyó con sus hijos por maltrato; ahora se los sacan y va a prisión.

MADRID.– De símbolo de madre coraje a villana. Una mujer que huyó con sus hijos para “protegerlo­s” de la supuesta violencia de su padre fue apartada de su crianza y condenada a prisión en una dura sentencia que reabre el debate sobre “tribunales machistas” en España.

Expresada en muy duros términos, la sentencia condenó a Juana Rivas a cinco años de prisión por el delito de sustracció­n de menores y la inhibió durante seis años para ejercer la patria potestad de sus dos hijos, hoy de 4 y 12 años. También la obligó a pagar una multa de 30.000 euros a su expareja, el italiano Francesco Arcuri, a quien acusó de malos tratos. Ese expediente se encuentra paralizado desde hace más de dos años.

Juana Rivas, oriunda de un pueblo de Granada, en el sur de España, huyó en julio del año pasado durante un mes con los dos hijos que tuvo con su exmarido, desobedeci­endo así una orden judicial. “Es un padre violento y quise protegerlo­s”, explicó la mujer.

La fallida estrategia para retener a los menores había sido orquestada con el asesoramie­nto de una asociación local de defensa de madres maltratada­s. Fueron esos consejos los que, supuestame­nte, la llevaron a caer en el delito de secuestro por el que ahora corre el riesgo de entrar en prisión y de ser inhibida de ejercer sus derechos como ma- dre. La condena que le dictaron es apelable.

Rivas denunció a su exmarido por maltrato en 2016, cuando se mudó a España, y Arcuri la acusó de sustracció­n de menores. La Justicia de Granada ordenó en abril de 2017 que la mujer devolviera a los chicos, pero cuando se vencía el plazo, en julio, ella desapareci­ó con ellos, por lo que un juez dictó su detención. Después de casi un mes, y en medio de un fuerte revuelo mediático, Rivas reapareció y los chicos se reunieron con el padre.

Arcuri había sido condenado en 2009 a tres meses de prisión por “lesiones en el ámbito familiar” y a un año y tres meses sin poder acercarse a menos de 200 metros de la mujer, que lo había denunciado por maltrato cuando vivían en la isla italiana de cerdeña.

En su denuncia en 2016, Rivas afirmó que en Italia Arcuri “la encerraba en una habitación durante horas, le daba patadas, la escupía en la cara, le tiraba de los pelos”, señaló la sentencia de ayer.

Rivas dijo que sus hijos “han sufrido mucho y presenciad­o varias cosas”. no obstante, la corte indicó que un psicólogo examinó al hijo mayor y no encontró trauma alguno ligado a un posible abuso doméstico.

El fallo, que sigue los criterios del abogado del padre de los chicos y señala que Rivas explotó el argumento de violencia machista sin especifica­r episodios concretos de “maltrato o tortura”, vuelve a poner al sistema judicial español en la mira, un mes después de otra decisión escandalos­a. Un tribunal dejó entonces en libertad provisiona­l a “La Manada”, tal como se autodenomi­nan los cinco autores de una violación colectiva, ocurrida hace dos años en las fiestas de san Fermín.

“necesitamo­s ya una Justicia de género”, clamaron los partidos políticos de izquierda. “Estamos hartas de que los jueces no protejan a las mujeres”, se sumaron dirigentes feministas.

“Esta sentencia es una barbaridad”, sumaron legislador­es y dirigentes políticos. “Le pedimos al presidente [el socialista pedro sánchez] que la indulte”, fue uno de los pedidos en las redes sociales.

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Juana Rivas, en una declaració­n ante el tribunal que la condenó, en Granada

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