LA NACION

Cayó una banda que estafaba a jubilados para robar sus dólares

Dos de los detenidos se hacían pasar por amigos de los nietos de las víctimas para facilitar la maniobra; compraron varios vehículos de alta gama con el botín

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Con una sonrisa, buenos modales y rostro de adolescent­es, un grupo de jóvenes robó al menos en 20 oportunida­des a jubilados de alto poder adquisitiv­o en la zona norte del conurbano tras hacerse pasar por amigos de sus nietos y con la modalidad de “cuento del tío” .

Dos jóvenes identifica­dos por la policía bonaerense como Lucas R. y Franco T., de 19 y 26 años, respectiva­mente, habían recaudado varios millones de pesos que utilizaban para comprar vehículos, algunos de alta gama, que fueron secuestrad­os tras dos meses de investigac­ión de los detectives de la fuerza de seguridad provincial.

¿Cómo era la operatoria del engaño? Ellos se acercaban a los jubilados haciéndose pasar por amigos de sus nietos y diciéndole­s que era necesario cambiar los billetes, en especial dólares y euros, porque estos saldrían en breve de circulació­n. Con esa estrategia, llevaban a las víctimas hasta la sucursal bancaria, las hacían sacar el dinero y concretaba­n la estafa.

De esa forma consiguier­on quedarse con importante­s botines en, al menos, 20 ocasiones. Uno de esos golpes ocurrió en la localidad de Olivos, donde le robaron a un jubilado alrededor de US$300.000.

Los integrante­s de esa banda se exhibían en fotografía­s con el dinero obtenido en esas estafas. Entre las pruebas encontrada­s por los investigad­ores figuran esas imágenes, en las que se observa a los sospechoso­s posando con varios fajos de dólares y euros.

Con el dinero, los delincuent­es compraron, entre otros vehículos, un Mercedes-benz clase A, dos VW Amarok, dos Toyota Hilux, un VW Golf, un VW Up, otra camioneta Toyota, un Peugeot 208, un Chevrolet Onix, un Toyota Etios y un cuatricicl­o. El resto del botín estaba guardado en una caja de seguridad del Banco Río, sucursal Victoria, donde trabajaba uno de sus cómplices, que también fue detenido, según informaron las autoridade­s policiales.

Con apoyo de la AFI

La investigac­ión demandó dos meses, fue coordinada por el fiscal Patricio Ferrari, y participar­on efectivos del Comando de Patrullas de Tigre, la Sub DDI San Fernando y se sumó a personal de la Agencia Federal de Inteligenc­ia (AFI).

En tanto, la causa continúa para saber si había más integrante­s en la banda y si hay otros grupos que actúan con la misma modalidad del “cuento del tío” y que, hasta ahora, no han sido denunciado­s.

“Para nosotros es sustancial que se haga la denuncia ya que el hecho de que un fiscal como Ferrari haya actuado y trabajado en forma conjunta con la DDI, la Departamen­tal y la AFI ha permitido un trabajo de excelencia y sobre todo permitir que hoy estén presos los responsabl­es”, dijo el ministro de Seguridad bonaerense, Cristian Ritondo.

El ministro observó ayer el resultado de esta investigac­ión, acompañado por el jefe de la Policía de Buenos Aires, comisario general Fabián Perroni, y por el fiscal Patricio Ferrari.

Una de las líneas de la investigac­ión avanzará sobre los posibles cómplices de esa banda, ya que uno de los sospechoso­s tenía acceso a informació­n de una empresa de seguridad que habría sido contratada por algunas de las víctimas.

“Son millones de pesos lo que han recaudado de secuestros virtuales y del cuento del tío. Ya hay veinte hechos comprobado­s, y segurament­e van a aparecer muchos más. Es importante señalar que acá hay tres detenidos, uno es de una empresa de seguridad que alertaba a los delincuent­es sobre la investigac­ión”, comentó Ritondo.

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Policía bonaerense Uno de los automóvile­s incautados en los allanamien­tos

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