Un paso más para volver a encontrarse con la mística del pasado
En un clima hostil tras el reclamo, San Lorenzo jugará en Chile, a cuatro años de la Libertadores
Hace exactamente cuatro años, San Lorenzo vivió uno de los momentos más emotivos de su historia, la conquista del trofeo tan esquivo: le gritó al mundo que era el dueño de la Copa Libertadores, luego de vencer a Nacional, de Paraguay, por 1-0 en el Nuevo Gasómetro. En estos días, varios protagonistas recordaron la gesta en las redes sociales: Leandro Romagnoli, Sebastián Torrico, Néstor ortigoza, Martín Cauteruccio y Héctor Villalba, entre otros. Pero la actualidad del Ciclón en el plano internacional y el local lejos está de la euforia de aquellos días.
Hoy, en el certamen más prestigioso de Sudamérica es tiempo de sus pares en la elite argentina: Boca, River, Independiente y Racing, que se lucen con equipos más ensamblados.
Uno de los principales adversarios de San Lorenzo, hoy, es la confusión en el juego. Ahora, sin merecerlo por lo hecho la cancha, al equipo le surgió una gran oportunidad de avanzar a los octavos de final por la Copa Sudamericana tras el reclamo que presentó ante Conmebol por la incorrecta inclusión de Jonathan Requena en Temuco. En el Nuevo Gasómetro, el conjunto chileno se había llevado un 2-1 memorable, pero esta noche saldrá a su estadio, Germán Becker, con un 3-0 en contra.
El Ciclón se topó con un clima hostil apenas pisó tierra chilena. Hay enojo por su pedido y simpatizantes de Temuco rompieron un vidrio del micro que trasladó al plantel. Marcelo Salas, el presidente del club, reclamó a su vez en Conmebol, pero el fallo no fue modificado.