LA NACION

Cuando la billetera mata la Copa Davis

- Sebastián Fest

Suena a broma, pero es muy serio. “La Copa Davis de Piqué”, titularon no pocos medios tras conocerse que el futbolista del Barcelona se salió con la suya. El mero hecho de darle al esposo de Shakira la simbólica (y un poco más) propiedad de uno de los trofeos más emblemátic­os de la historia del deporte habla de lo lejos que llegó la Federación Internacio­nal de Tenis (ITF). Muy lejos, aunque la aprobación se lograra por poco: se necesitaba el 66,6% de los votos de los miembros de la ITF y se logró el 71,4%. Dave Haggerty, el estadounid­ense que ganó hace tres años la presidenci­a de la federación, paga el costo de una profunda división en el tenis. La leyenda australian­a John Newcombe cree que el nuevo formato implica el “asesinato” de la Davis, y el joven francés Pouille fue clarísimo: “A esto ya no se lo puede llamar Copa Davis”. Y tiene razón: lo que se jugará en noviembre del año próximo en Lille o Madrid se parece mucho más a una Copa Mundial por Equipos (aquella de Düsseldorf) reloaded que a la Davis tal como se la conoció por más de un siglo. Está claro que con la nueva Davis se gana mucho más dinero, pero se pierde algo esencial: la conexión con las nuevas generacion­es, esa magia que solo lega cuando se ve algo en persona, cuando se lo siente, se lo escucha, se lo toca. Es lo que les sucedió a muchos chicos y adolescent­es argentinos en el invierno de 1988, semanas antes de aquel Plan Primavera que solo serviría para demorar la hiperinfla­ción de 1989. El sorteo de la Davis determinó que Estados Unidos visitara la Argentina, y lo hizo con un grande de todos los tiempos como John McEnroe y un grande en ciernes como Andre Agassi. Más de alguno que estuvo en aquellas tardes congeladas en el Buenos Aires Lawn Tennis recordará aún cómo abucheó a Agassi, que se burló de Martín Jaite atajando un saque suyo... con la mano. Muchos de aquellos jóvenes abrazaron el tenis aquel día para siempre. ¿Lo harán también aquellos que se sienten frente al Smart TV para ver lo que suceda bien lejos? La AAT alega que es mucho el dinero que llegará a sus arcas, así como a las de las otras federacion­es. Habrá que esperar y ver. ¿Llegará la semana estelar de la nueva Davis alguna vez a la Argentina? ¿Se garantiza la presencia de las estrellas que venían dándole la espalda al torneo? Quizás, aunque hay que recordar que, cada vez que la ATP les redujo el calendario para ampliar sus semanas de descanso, los jugadores organizaro­n exhibicion­es para engordar la hucha. Está claro: billetera mata Davis.

 ??  ??

Newspapers in Spanish

Newspapers from Argentina