El FMI dijo que tiene buena voluntad para retomar el diálogo
Expresó en un comunicado que aún no decidió dar un adelanto del crédito acordado
Pese a lo expresado por el presidente Mauricio Macri en su breve mensaje televisivo de poco más de un minuto y medio, ayer por la mañana, en el que dijo que el Fondo Monetario Internacional (FMI) adelantaría los recursos necesarios para cumplir el programa financiero, el desembolso aún no estaría confirmado. Al menos eso es lo que surge del comunicado que hizo público el organismo más tarde.
En ese texto, Christine Lagarde, directora gerente del FMI, hizo ayer la siguiente declaración sobre la Argentina: “El presidente Macri y yo mantuvimos una conversación productiva el día de hoy. El Presidente indicó su deseo de trabajar en el fortalecimiento de las políticas que sustentan el acuerdo stand-by con el FMI”.
A continuación, en el comunicado se explica que, “teniendo en cuenta las condiciones más adversas del mercado internacional, que no se habían anticipado plenamente en el programa original con la Argentina, las autoridades trabajarán para revisar el plan económico del Gobierno con el objetivo de fortalecer a la Argentina frente a los recientes cambios en los mercados financieros mundiales, mediante políticas monetarias y fiscales más fuertes y una profundización de los esfuerzos para apoyar a los más vulnerables”.
Y agrega: “Reiteré mi apoyo a los esfuerzos de política de la Argentina y nuestra disposición a ayudar al Gobierno a revisar sus planes de política económica”, afirmó Lagarde. “He instruido al personal del FMI para que trabaje con las autoridades argentinas a fin de fortalecer el acuerdo respaldado por el Fondo y reexaminar el cronograma del programa financiero. He acordado que nuestro objetivo es llegar a una conclusión rápida de estos diálogos para presentarla a nuestro directorio ejecutivo para su aprobación”, agregó.
La directora del FMI cierra el comunicado diciendo que confía en que “el fuerte compromiso y la determinación de las autoridades argentinas serán fundamentales para conducir a la Argentina a través de las difíciles circunstancias actuales y, en última instancia, fortalecerán la economía en beneficio de todos los argentinos”.
En definitiva, si bien las expresiones vertidas en el comunicado denotan la buena voluntad del FMI para con la Argentina, en ningún momento deja entrever que ya está decidido el adelanto de fondos al país, sino que más bien se insiste en que se seguirán las conversaciones.
En búsqueda de la tranquilidad económica que despeje las dudas de los mercados con respecto al programa financiero, Macri lideró personalmente las gestiones políticas con los principales socios del FMI. En ese grupo están países como Estados Unidos, Japón, China, Francia y Alemania, entre otros.
En paralelo, el equipo de Hacienda, liderado por Nicolás Dujovne, se puso en contacto con el staff del organismo de crédito, para continuar con una negociación que, según se supo, había comenzado hace varios días.
Fuentes cercanas al Presidente habían confirmado a la nacion que el anuncio de ayer a la mañana no cambiaba las condiciones generales del acuerdo con el FMI, pero sí eliminaba las trabas burocráticas que pudieran llegar a sufrir el giro de fondos.
Dujovne se sentía cómodo con el programa financiero del Gobierno, pero asumió que el mercado desconfiaba de ese plan. Antes que dejar madurar el fantasma de un eventual default, algo que en el Gobierno señalan como “una locura”, Macri y el ministro prefirieron cortar de raíz esa idea con el anuncio de ayer a la mañana.
En la práctica, el Gobierno tendrá para este año US$21.000 millones disponibles del Fondo, a los que se sumarán a otros US$29.000 millones futuros ya comprometidos. Hacienda insiste en que no está definido el uso de esos fondos, pero que el mercado puede tener la tranquilidad de que están disponibles.
Más allá del posible adelanto del FMI, Dujovne insistió en que no hay otra manera para evitar la crisis que reducir el déficit fiscal. La incógnita ahora es ver cómo se hará.