Al aire libre. la empresa que vende equipos de recreación a más de cinco países
Desde la localidad de Funes, Santa Fe, Crucijuegos fabrica desde peloteros hasta circuitos de entrenamiento y factura US$450.000 al año
Desde la localidad de Funes, en la provincia de Santa Fe, una empresa exporta diversión. Consolidada en 1992, Crucijuegos nació de la necesidad de varias ciudades de la provincia de contar con juegos seguros y atractivos para los vecinos en plazas y diferentes espacios comunes. Con el tiempo, el mercado fue pidiendo nuevos productos y así nació también la idea de exportar. Ignacio Imaz, uno de los dueños de la empresa, cuenta a la nacion el proceso de creación de los juegos infantiles, acuáticos, inclusivos y hasta musicales que desde sus instalaciones en esta localidad del Gran Rosario llegan a países como Perú, Chile, Uruguay y España. “Tratamos de usar la mayor cantidad de materiales sustentables posible en la fabricación de nuestros productos -dice Imaz-, con el menor impacto posible en el medio ambiente al momento de su instalación en las plazas y espacios públicos, fomentando a su vez la vida al aire libre y los hábitos saludables”. Crucijuegos realiza la fabricación de todos los insumos y partes de las diferentes líneas de productos que comercializa, sin depender de terceros. “De esta forma nuestros clientes tienen garantizada la provisión de repuestos para cualquier modelo de juego que hayamos fabricado”, dice Imaz, quien añade que, contrario a lo que se cree, sus juegos no solo apuntan a los niños, sino también a los adultos. Fue un largo camino lleno de obstáculos el que la empresa recorrió para posicionarse en el exterior. La primera barrera con la que se encontraron fue ser una empresa argentina: “Como país, muchos clientes desconfiaban por la volatilidad de nuestra economía... tenían desconfianza de depositar el dinero y que nosotros no cumpliéramos con lo pactado. Aún hoy se- guimos trabajando en romper ese prejuicio, aunque la visibilidad y experiencia que tenemos, además de las certificaciones en calidad y diseño con las que contamos bajo normas internacionales, ya son significado de confianza y garantía”, dice Imaz.
En este sentido, la empresa exhibe ser la única del país en este rubro en poseer la certificación IRAM ISO 9001, que sin duda fue indispensable para la exportación de sus productos por un valor de US$450.000 dólares el año pasado.
En tanto, en lo que va de 2018, Crucijuegos ya ha realizado ventas a Paraguay, Chile y Brasil, y el mercado externo le representa a la empresa hasta un 5% de su facturación anual. “Nuestro fuerte son los equipamientos de la línea de productos acuáticos, que nos solicitan los hoteles, campings y parques acuáticos”, dicen desde la empresa.
En busca de mercados
La venta de este tipo de productos puede ser bastante difícil y competitiva. Por eso, destacan que la presencia local en los mercados donde tienen presencia ha sido indispensable para sostener los negocios. “Nos interesa ser una empresa con presencia en el exterior, así que realizamos visitas periódicas a los clientes consolidados y potenciales nuevos clientes, abrimos oficinas en España, Uruguay, Brasil, Bolivia, Chile y Paraguay, y ofrecemos asesoramiento, la instalación de los juegos, equipamientos y garantía de provisión de repuestos en forma constante”, señalan. “Desde el principio tuvimos claro que nuestra ventaja competitiva diferencial es que todas nuestras líneas de productos están desarrolladas según normas europeas, como la EN1176 y la EN71, regulaciones americanas como ASTM y Cpsia y normas ISO 9001, que fueron puestas a prueba para garantizar su larga duración. Son productos de alta calidad”, destaca Imaz.
Evolución
La inclusión, el bienestar y la salud se han convertido en objetivos claros de la administración pública, razón por la cual los diseños de los juegos apuntan a suplir estas características, altamente demandadas por municipios y parques temáticos a nivel nacional, pero también en otros países. “Desde el departamento de Investigación y Desarrollo de la empresa tratamos de innovar y mejorar en la línea de los juegos inclusivos para espacios públicos. Es para nosotros importante ofrecer juegos infantiles con accesibilidad para sillas de ruedas, por ejemplo. También juegos que permitan desarrollar las destrezas de los niños, donde incorporamos novedosos materiales, redes trepadoras combinadas con caños estructurales curvados que crean formas que brindan múltiples posibilidades de juego”. Para los adultos, en cambio, destacan los circuitos de entrenamiento, vistos con mayor frecuencia en las plazas públicas.