Piden apartar al sucesor de Nisman
La AMIA y la DAIA objetan al fiscal Roberto Salum
En lo que puede ser el inicio de un nuevo escándalo, la AMIA y la DAIA reclamaron el apartamiento del fiscal Roberto Salum, sucesor de Alberto Nisman en la Unidad Fiscal AMIA, por “temor de parcialidad”. Lo acusan de haber beneficiado al exreducidor de autos Carlos Telleldín, el principal acusado en la investigación por el atentado contra la sede de la mutual judía.
La solicitud fue dirigida a Rodolfo Canicoba Corral, el juez federal que instruye la causa por el ataque. Pero tiene origen en la actuación que está desempeñando Salum en el juicio oral por el encubrimiento del atentado, que atraviesa su etapa final. La UFI AMIA interviene en todo los procesos vinculados al ataque perpetrado en 1994.
Las entidades denunciaron que, en contra de lo que sostuvo siempre la propia UFI AMIA, Salum señaló en su alegato que Telleldín, no había acondicionado y cedido la camioneta para llevar a cabo el atentado, sino que la había vendido. Esto pone en riesgo, advirtieron la AMIA y la DAIA, la acusación que debe hacer la propia fiscalía en el juicio oral por el atentado, cuyo inicio está previsto para marzo del año que viene.
“Si Telleldín ‘entregó’ la camioneta en condiciones tales que a los ojos de los acusadores participó de la producción del atentado, hecho por el cual se encuentra con procesamiento firme y en condiciones de ser juzgado en juicio oral, que incluso ya tiene fecha de inicio fijada, pues entonces en modo alguno pudo haberla ‘vendido’, como pretende el doctor Salum, pues eso eliminaría toda responsabilidad en cuanto al hecho criminal”, dice el escrito de recusación, del 10 de septiembre, firmado por el presidente de la AMIA, Agustín Zbar, y el presidente de la DAIA, Alberto Indij.
En la misma presentación se advierte que la posición de Salum ya fue usada por Telleldín para hacer planteos exculpatorios ante el tribunal que lo va a juzgar a partir de marzo como partícipe necesario del atentado. Se señala además que la UFI AMIA se “desentendió” de ese juicio oral, al ceder su lugar en ese proceso a una fiscalía que actúa ante los tribunales orales.