LA NACION

El BCRA ya bajó en dos tercios su deuda en Lebac, pero el desarme hace subir el dólar

La entidad busca acelerar el proceso al pagarles a quienes renovaron esas letras hasta 9,7 puntos menores que las LETE

- Javier Blanco

El Banco Central (BCRA) ya redujo en dos tercios la millonaria y costosa deuda que había emitido para retirar pesos del mercado y combatir la inflación en Lebac en los últimos años y que en realidad, y fruto de la emisión monetaria que agregaba, terminó empujándol­a aún mucho más al disparar luego encima una corrida contra el peso que lleva más de cinco meses.

Pero debió convalidar como parte de ese proceso una escalada extra del 35% en el valor del dólar desde que inició oficialmen­te el desarme en agosto (pasó de $29,80 a $40,50 de ayer), un salto que se agregó al 60% de aumento que ya había tenido la divisa en la plaza local en el año hasta entonces, lo que sirvió para ratificar al peso como la moneda más castigada del mundo en el año.

El balance surge de los dos capítulos ya desarrolla­dos del desarme de las Lebac, los que sirvieron para reducir el stock de esta deuda de los $976.777 millones a los $330.000 que aún restan. Pero la licitación de ayer dejó un dato extra: la entidad mostró que está decidida a acelerar los tiempos de este proceso para tratar de terminar con un factor que le agrega volatilida­d al mercado cambiario.

Lo hizo al pactar pagar a quienes insistiero­n en renovarle Lebac y le acercaron ayer $214.235 millones en ofertas de compra pese a que había anunciado que solo colocaría $150.000 millones en nuevos títulos, un interés del 45% anual (igual al del último mes) en un contexto de tasas al alza (el propio BCRA subió del 45 al 60% la de referencia a fin de agosto).

Estas tasas resultan hasta 9,7 puntos menores a la que el Tesoro le concedió la semana pasada a quienes le compraron LETE en pesos capitaliza­ble a 3 meses. y que se descuenta repetiría hoy al ofrecer hasta $150.000 millones en esos títulos con foco especial en los más de $61.000 millones que no pudieron renovar Lebac pese a haberlo intentado.

No en vano, en el comunicado, el BCRA dijo esperar “que la fuerte demanda observada por Lebac se vuelque a la licitación de Letras de mañana [por hoy] confirmand­o así que la persistent­e contención de la liquidez en pesos tiende a fomentar la demanda por estos activos y asegurar una creciente estabilida­d del mercado cambiario”.

“Con el corte al 45% anual, que la deja por debajo de la tasa implícita en mercados de futuros, el BCRA firmó el acta de defunción de las Lebac”, evaluó de manera gráfica el economista Federico Furiase, de Eco/Go. “Es una manera de decirles a esos pesos que busquen otro destino, que además se los sugiere en el comunicado”, insistió en obvia relación a la expectativ­a que el BCRA mostró por ese traslado.

Un proceso complicado

“A fines de abril, la suma de la deuda emitida por el BCRA (Lebac + Leliqs) equivalía a US$68.000 millones, lo que representa­ba el 110% del stock de reservas de entonces. Al último día de agosto, por la decisión delimitarl­os montosa renovar y la fuerte depreciaci­ón del peso (en parte, inducida), este stock cayó al equivalent­e a US$25.700 millones, poco menos de la mitad de las reservas. Algunos dirán que la bomba de las Lebac fue desactivad­a y otros que –en rigor– explotó. Pero lo cierto es que este pasivo tan perturbado­r para la política monetaria perdió gran parte de su potencial disruptivo”, valoró el economista Federico Muñoz.

Para el asesor financiero Alejandro Bonavita, la evaluación de los daños es más amplia. “La parte ‘voluntaria’ del desarme; la decidida por el mercado, arrancó en abril con un dólar que subió de $20 a $25 en días. La dispuesta por el BCRA costó en agosto otro 25% de devaluació­n consideran­do un dólar que pasó de $30 a 37,5. Y veremos qué ocurre ahora dado que recién mañana [por hoy] se van a liberar los pesos no renovados y ahí podremos ver el impacto en el tipo de cambio y en reservas. Pero lo que me parece que queda bien claro es que subestimó esta bomba”.

La licitación del próximo mes parece clave para darle el golpe de gracia a esta deuda ya que el 82% de las Lebac renovadas ayer ($128.354 millones) vencerán en 28 días. Por los otros dos tramos (a vencer a mitad de noviembre y de diciembre) hubo ofertas de compra por apenas $37.500 millones de los que se adjudicaro­n solo unos $ 21.500 millones.

Con la desaparici­ón de las Lebac no se acaban los pasivos del BCRA, pero cambiarán notablemen­te su composició­n y la contrapart­e mayor pasarán a ser los bancos que, desde mañana, tendrán Letras de Liquidez (Leliq) por entre $320.000 y 350.000 millones. “Por primera vez al stock de Leliq superará al de Lebac”, destacó Balanz Capital, para quien la contracció­n monetaria extra que lograría el BCRA con la venta de reservas y la suba de encajes rondaría los $100.000 millones y lo ayudará a consolidar el sesgo contractiv­o de la política monetaria.

Newspapers in Spanish

Newspapers from Argentina