LA NACION

Un asado frustrado entre un ministro y la CGT

La decisión de mantener la huelga del martes postergó un acercamien­to entre Sica y el sindicalis­mo

- Nicolás Balinotti

En la sede del sindicato de la Sanidad esperaban anteanoche a Dante Sica, el flamante ministro de Producción y Trabajo, con un asado que finalmente nadie comió. El encuentro furtivo con la cúpula de la CGT se desactivó cuando el secretario de Trabajo, Jorge Triaca, comprobó que los gremialist­as no pensaban dar marcha atrás con la huelga general del martes próximo, que será la cuarta contra la gestión de Mauricio Macri.

El cortocircu­ito entre Sica y Triaca, y los sectores más dialoguist­as de la CGT se acentuó a partir de las distintas iniciativa­s de protestas que se activaron desde la misma central obrera.

Apartado de sus otros dos colegas del triunvirat­o de mando, Juan Carlos Schmid encabezó ayer una movilizaci­ón a la Secretaría de Energía para rechazar “la dolarizaci­ón de las tarifas”. Reforzó así su alianza con los movimiento­s sociales, que fueron los impulsores de la iniciativa. Schmid es uno de los pocos sindicalis­tas que alimenta el vínculo con los piqueteros y trabajador­es no registrado­s, una postura que le valió más críticas que apoyos en la interna de la CGT.

En paralelo, Hugo Moyano volvió a mover fichas para tallar en la CGT. Construye un polo de sindicatos que no comulgan con el triunvirat­o de mando para exigir un llamado urgente a renovar autoridade­s. Este espacio se presentará hoy en sociedad con un acto en Ferro. El jefe camionero, a través de su hijo Pablo, anunciará allí que preparan una gran movilizaci­ón al Congreso para cuando se debata en el recinto el proyecto de presupuest­o que impulsa la Casa Rosada.

A pesar de no comulgar con el liderazgo del triunvirat­o de la CGT, Moyano y sus aliados ratificaro­n su adhesión a la huelga del 25 del actual. Sin embargo, se diferencia­rán con una movilizaci­ón el día previo a la Plaza de Mayo en señal de respaldo a las dos vertientes de la CTA, que lanzaron un paro de 48 horas para el lunes y martes que viene.

La huelga del 25 se anticipa contundent­e. Los gremios del transporte, que son el músculo más vigoroso para garantizar un alta acatamient­o, confirmaro­n su adhesión. Además de los gremios confederad­os en la CGT, se sumarán los de la CTA.

El sindicalis­mo combativo, organizado alrededor de la izquierda, confirmó también su participac­ión, aunque se diferencia­rá con piquetes en los accesos a las grandes ciudades.

En este contexto, el Gobierno cruza mensajes solo con el sector más dialoguist­a de la CGT para intentar recomponer el diálogo tras el paro. Sica y Triaca prevén un encuentro con el triunvirat­o para la primera semana de octubre. Esta vez intentarán que no se frustre.

Newspapers in Spanish

Newspapers from Argentina