LA NACION

La receta de Pucará: ganar, pero dosificand­o los esfuerzos

El DT Jorge apuesta al recambio para evitar el desgaste; así resolvió un partido complejo y quedó cerca de clasificar­se

- Agustín Monguillot

Es unánime. Quiénes forman parte del Top 12 de la URBA suelen describirl­o con una palabra: exigente. No solo por el nivel de paridad, sino porque la extensión de su calendario (pueden jugarse hasta 24 partidos) lo convierte en un torneo extenuante. Allí es donde los planteles largos cobran una importanci­a significan­te. En el caso de Pucará, lo sobrelleva con un sistema de rotación de jugadores. Ayer quedó a la vista su éxito, con la victoria como visitante ante el San Isidro Club por 39 a 21 que lo dejó en la puerta de la zona de clasificac­ión y a su rival prácticame­nte fuera de la pelea.

Gustavo Jorge y sus colaborado­res llevan en una planilla de Excel la cantidad de minutos de todos sus jugadores para evitar al máximo su nivel de desgaste. Así, son varios los jugadores que están preparados para rendir a la máxima exigencia. “Cuando lleguemos al final del torneo, cada jugador va a tener, por lo menos, dos o tres partidos menos”, dice el entrenador. Quizá por eso no llamó la atención que el Cuta haya hecho cuatro cambios y modificado piezas clave de su columna vertebral para un partido tan determinan­te para sus aspiracion­es.

Tulio Sosa, su capitán, valora el recambio: “Cualquiera de los que está en el banco puede ser titular y eso nos da un plus. Cuando estamos cansados, los que entran lo hacen muchísimo mejor”. El banco terminó siendo la solución para un Pucará que no la pasó bien durante buena parte de la primera mitad.

lo que se presumía como un desenlace cerrado se invirtió con los cambios del entrenador y Pucará le metió 25 puntos en el segundo período. los ingresos de Guido Romandetto (marcó un try a pura potencia) y Federico Scarlatto renovaron a los delanteros, que pasaron a generar mayor obtención y a dominar los puntos de encuentro. También hizo ajustes en los tres cuartos, entre los cuales Juan Cappiello aseguró el triunfo con un try y le aportó una mayor solidez defensiva. El Cuta Jorge le resta importanci­a: “Se destacaron los que entraron, pero el secreto es cuando Pucará logra jugar”.

“Tenemos un plantel largo, lo que es importante. Hay una competenci­a interna muy grande y en el club respetamos el hecho de que a veces te toca jugar y a veces no, pero siempre hay que apoyar de donde te toque. Esa competenci­a hace subir el nivel de juego”, valora lucas González Amorosino.

Ausente por lesión Tomás Jorge, el ex Puma volvió a jugar como fullback, la posición en la que brilló durante toda su carrera. Su regreso al club el año pasado lo encontró en un rol de organizado­r de juego, como apertura. “los backs de Pucará tenemos una premisa que es que después de la primera puntada no tenemos posiciones definidas. Cualquiera puede jugar en cualquier posición”, aclara lucas, que está viviendo sus últimas semanas como jugador dado que se retirará al concluir esta temporada.

El match con Hindú dentro de 15 días( habrá una semana de reces o) será el más importante del año hasta el momento para Pucará. la sorpresiva derrota del club de Don Tor cu atoan te CUBA acortó a un punto la diferencia entre los dos que pondrán en juego el virtual cuarto puesto. “Es una linda medida para ver dónde estamos parados”, dice González Amorosino.

El antecedent­e más importante es el de las semifinale­s de la temporada pasada, donde Pucará tuvo buenas intencione­s pero no alcanzaron para doblegar la experienci­a del campeón del rugby argentino. Para Jorge pasará por una cuestión de efectivida­d: “Hindú es un equipazo, el mejor de los últimos 20 años. Vamos a tratar de que todos los quiebres que hagamos en el partido terminen en puntos”.

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Pedro ragaglia El ataque en bloque de Pucará para perforar la defensa del SIC, en Boulogne

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