LA NACION

Con la victoria en el debut, Las Monjitas disiparon el cambio

Luego de la sorpresiva decisión de utilizar a Santiago tocalino en reemplazo de de Lusarreta, vencieron 14-10 a Cría Yatay

- Alejandro Panfil PARA LA NACIoN

La decisión de Las Monjitas de cambiar en plena Triple Corona a Julián de Lusarreta por Santiago Toccalino fue una resolución meditada y conversada. El polo no está acostumbra­do a esos golpes de timón y, por consiguien­te, se los vive con cierta incomodida­d. La organizaci­ón liderada por el colombiano Camilo Bautista dio un paso hacia lo que podría llegar a tener este deporte en un futuro no muy lejano: flexibilid­ad y timing a la hora de conformar equipos, con la meta conseguir logros importante­s. Ayer, en el predio de la Asociación Argentina de Polo, en Pilar, el equipo que tiene en Guillermo Caset e Hilario Ulloa, ambos con 10 goles de handicap, como figuras, puso en práctica lo que la organizaci­ón pretendía: ser un conjunto más sólido y agresivo, que se posiciona en la elite y desea pelearle de igual a igual los títulos a quienes dominan la Triple Corona, La Dolfina y Ellerstina.

En el comunicado oficial que se publicó en la previa del debut en 125° Abierto de Hurlingham, Las Monjitas explicó la razón de apartar a Julián de Lusarreta (7) –sólo jugó dos partidos, ante La Albertina y Ellerstina, por el Abierto de Tortugas–, como una modificaci­ón táctica, ya que sentían la necesidad de tener un back natural, más aguerrido y de mayor determinac­ión. A Toccalino ya lo conocían por venir practicand­o con él durante el último mes y por eso no dudaron en tomar la decisión, aunque se estuviera en plena competenci­a. Y tras el trabajado triunfo 14-10 sobre Cría Yatay, por la zona B, hubo satisfacci­ón en el palenque: el cambio trajo el resultado esperado. Las Monjitas se ofrecen como rivales de peligro para pulsearle la hegemonía a los dos más grandes animadores de la Triple Corona.

Hilario Ulloa, de gran actualidad a nivel individual y con muchas ganas de coronarse campeón en el corto plazo, no ocultó la satisfacci­ón por la victoria y por dejar atrás una decisión que no fue fácil de tomar: “Me gustó la intensidad con la que jugamos y cómo movimos la pelota, de primera y rápido. Me gustaron esos chispazos de los primeros cuatro chukkers y cómo terminamos el partido. Jugando con esa intensidad tenemos un equipazo”, resaltó.

Las Monjitas no buscaba un mejor jugador que De Lusarreta, a quien le ven un enorme futuro. Buscaban un back natural que los potenciara desde el fondo. Y es eso lo que encontraro­n practicand­o en su propia casa. Ulloa, Caset y Sola se sienten más cómodos y confiados con la incorporac­ión de Toccalino: “Tiene intensidad, pegada y se involucra mucho en el partido. Creemos que era el cambio que necesitába­mos para seguir creciendo y por suerte él era nuestro suplente”. Respecto de cómo se manejaron con De Lusarreta, Ulloa comentó: “Por supuesto que no son cosas lindas y la idea del Negro era jugar Palermo y triunfar, pero se habló de frente y lo decidimos para el bien del equipo”.

“Santi se acopló muy rápido y jugamos muy bien”, comentó Facundo Sola. También Toccalino contó cómo vivió el cambio: “Era un día difícil. No venía jugando, más allá de practicar con ellos todo el mes. No conocía los caballos ni el equipo y la cancha estaba un poco brava, pero jugué los últimos cuatro Abiertos y me siento preparado para esta oportunida­d”.

Sobre la salida de De Lusarreta sólo se limitó a expresar: “Trato de mantenerme lo más al margen posible y y hacer lo que me piden mis compañeros y la organizaci­ón. Me llamaron hace tres o cuatro meses para ser parte desde afuera y hoy trato de aprovechar esta oportunida­d”.

Para Eduardo Heguy, recienteme­nte incorporad­o al staff técnico, no fue sencillo enfrentar la salida de De Lusarreta. De hecho, su primo Marcos lo había recomendad­o e incluido. “No fue una decisión simpática, pero no es la primera vez que pasa y creo que era lo mejor para el equipo, aunque es muy duro”, expresó el ex multicampe­ón con Chapaleufú II. “Hoy las organizaci­ones son más profesiona­les, los caballos ya no son de los jugadores como en otras épocas y cada uno busca ganar. Antes se jugaba más para amigos y familiares y hoy hay tipos que priorizan el ganar”, explicó.

Las Monjitas quieren ser parte del futuro, de ese polo más flexible en cuanto a las formacione­s y los cambios y en el que las organizaci­ones provean caballos y contratan a los mejores jugadores para llegar a lo más alto. Y esa es la razón por la que se amigaron con una decisión que para el mundo de este deporte se considera inusual y antipática.

“Las Monjitas tiene dos jugadores con 10 de handicap y lo que más desean en su vida es poder levantar alguno de estos trofeos. Hay que mantener la calma para que esa ansiedad y esas ganas no jueguen en contra, pero es buen síntoma que ellos quieran jugar y ganar acá”, cerró el Ruso, que sabe bien lo que significa ganar y por eso empatiza con quien ansíe logros importante­s.

 ?? S. FiliPuzzi ?? toccalino, un back natural, la búsqueda de las Monjitas
S. FiliPuzzi toccalino, un back natural, la búsqueda de las Monjitas

Newspapers in Spanish

Newspapers from Argentina