Dos jueces se disputan el caso del exsecretario
La investigación sobre Muñoz enfrenta a Bonadio con Rodríguez
Lo que era una sorda disputa por oficio, se convirtió ayer en una guerra abierta. Dos jueces y un fiscal se pelean por la causa en la que se investiga el patrimonio millonario de Daniel Muñoz, el exsecretario de Néstor Kirchner.
Por un lado, pulsea el juez Claudio Bonadio porque entiende que los 70 millones de dólares con los que compró propiedades en Estados Unidos son un derrame de lo que contenían los bolsos con coimas que recaudaba Muñoz. Y por otro lado está el juez Luis Rodríguez, que sin apuro viene siguiendo el caso desde 2013, como parte de una maniobra de lavado. El fiscal en ambos expedientes es Carlos Stornelli.
Bonadio, que abrió esta causa en abril, detuvo a la viuda de Muñoz, Carolina Pochetti, y a sus supuestos testaferros por el lavado de dinero. Lo hizo después de que la Cámara Federal revocara una decisión de Rodríguez, que se había negado a congelar las cuentas de los sospechosos. Stornelli le pidió a Rodríguez que se inhiba de seguir investigando y que le mande el expediente a Bonadio.
Pero ayer Rodríguez, tras las detenciones, rechazó ese pedido de Stornelli y decidió citar él mismo a indagatoria a Pochetti y a sus testaferros. Decidido a quedarse con la causa hizo una resolución en la que criticó con aspereza al fiscal. No es un secreto en tribunales que tiene diferencias procesales.
Rodríguez hizo suyas las palabras del abogado de Pochetti, Miguel Plo, quien dijo que su clienta fue indagada por Bonadio no en la causa de los cuadernos, sino en otro expediente recién iniciado, similar al suyo. Así Rodríguez advirtió a Stornelli y a la UIF –que tiene una mirada crítica de cómo el juez lleva la causa– que era su deber como acusados advertir si “se distorsionan las investigaciones que ellos mismos impulsan”.