LA NACION

con el sello de siempre: habitabili­dad, confort y eficiencia; así es el honda fit 2019.

El nuevo Honda Fit 2019 mantiene vigentes las cualidades que siempre distinguie­ron a este modelo, mezcla de hatch y monovolume­n; habitabili­dad, mecánica eficiente y gran confort

- Por Gabriel Tomich

El Honda Fit es un modelo difícil de clasificar. Lo que no está mal. Por el contrario con su carrocería mezcla de hatchback y monovolume­n rompe con el estereotip­o de sus competidor­es entre los autos compactos de 5 puertas.

Esta síntesis de estilos tiene un beneficio directo: la notable habitabili­dad que ofrece. Es decir, gran espacio interior, confortabl­e posición de manejo y un baúl que no desentona. En el Fit se aprovecha hasta el último milímetro para brindar una gran comodidad de uso en un envase relativame­nte pequeño.

Esta nueva versión 2019, encuadrada en la tercera generación del modelo, llega desde Brasil con un ligero restyling (en una única versión EXL full), más tecnología (tanto de infotainme­nt como de seguridad) y un cambio de mecánica para reemplazar a la 2017, que provenía de México y volvió a poner al Fit en el catálogo de Honda, tras algún tiempo de ausencia.

Los cambios en el diseño pasan por una nueva

parrilla cromada, paragolpes y faros remodelado­s (estos últimos con tecnología full LED, que iluminan muy bien) y llantas de 16” con renovado diseño. En el interior, el estilo no ha cambiado, pero sí la pantalla táctil de la consola ,que ahora es más grande (7” contra 5” de la anterior) y táctil, a tono con la incorporac­ión de las interfaces Carplay y Android Auto y de las imágenes de la cámara trasera que ofrece tres ángulos de visión (que se completa con sensores sonoros traseros); el sistema cuenta además con Bluetoo, puertos USB y auxiliar, y audio con compensaci­ón de volumen en fujción de la velocidad (SVC) .

El cambio de mecánica es marcado, este Fit brasileño utiliza el motor del City, mientras que el mexicano estaba equipado con un propulsor con inyección directa de combustibl­e de 132 CV.

Sin embargo, para el uso urbano y familiar que propone el Fit, el conocido motor naftero de 4 cilindros en línea 1.5 L, con sistema automático de regulación de válvulas I-VTEC e inyección indirecta de combustibl­e, resulta más que suficiente. Con una potencia de 120 CV a 6600 rpm y un par motor de 14,8 kgm a 4800 rpm, este propulsor se asocia muy bien con la caja automática del tipo CVT (variable continua) de Honda que, a diferencia de otras transmisio­nes similares no “patina” y mantiene el régimen de giro del motor (dato disponible en el cuentavuel­tas) al soltar el acelerador, por lo que el andar en la ciudad es muy ágil y vivaz; por las dudas, tiene modo manual-secuencial de 7 marchas (con prácticas levas al volante) y función Sport (que lo pone más “picante” en aceleració­n). En la ruta no desentona, pero obviamente no es su “hábitat” natural. Así, los tiempos de aceleració­n son muy buenos para la categoría: 0 a 100 km/h en 10,5 s, 0-400 m en 17,6 s y 80-120 km/h en 7,3 s; igual que los consumos, con 9,8 L/100 km en ciu- dad y 8,2 a 120 km/h constantes. En un circuito mixto (urbano y autopista) marcó muy buenos 8,5 L/100 km. En resumen, un conjunto eficiente y acorde para el modelo.

A la buena respuesta mecánica se le suma la de todos los componente­s que tienen que ver con el chasis. Las suspension­es son suaves y copian muy bien los desniveles, así ofrecen un muy buen confort de marcha. Pero es un poco bajo, por lo que hay que pasar con bastante cuidado por ciertas cunetas y pozos. La tenida en curvas no ofrece reparos y ahora sí el Fit cuenta con control electrónic­o de estabilida­d y tracción (que en Honda llaman VSA) además de ayuda de aranque en pendiente (HSA) que, obviamente, incrementa­n el nivel de seguridad en todas las situacione­s de marcha.

El confort dinámico al que aludimos tiene un muy buen aliado en la nueva y excelente direc- ción eléctrica, cuya respuesta hace también a la agilidad urbana y esto al placer de conducir este modelo que, como dijimos, ofrece una gran habitabili­dad, con una posición de manejo cómoda (la butaca tiene regulación manual en altura, igual que el volante, que además ajusta en profundida­d) y buen espacio para otros tres adultos, que ahora están más protegidos con la incorporac­ión de 6 airbags contra solo los dos del Fit anterior. Los asientos traseros son modulares (gracias al sistema ULT Utility-long-tall): debajo tienen huecos para guardar algunos útiles y elementos, lo que se suma a la capacidad de carga del baúl, que tiene sus buenos (para el segmento) 363 litros.

El recuento deja mucho en el haber: mecánica, más equipamien­to y tecnología, confort de marcha y más, pero todo eso hay que pagarlo. Este Honda Fit EXL cuesta $749.999.

 ??  ??
 ??  ??
 ??  ?? sin cambios. Gran habitabili­dad y muchos espacios portaobjet­os para viajar cómodos
sin cambios. Gran habitabili­dad y muchos espacios portaobjet­os para viajar cómodos

Newspapers in Spanish

Newspapers from Argentina