Matan a un policía encubierto en una villa de Avellaneda
El oficial buscaba a un abusador y fue sorprendido por seis delincuentes
Leonardo Sarmiento tenía 40 años y hacía 13 que trabajaba como policía bonaerense. Fue asesinado ayer cuando desarrollaba tareas de vigilancia como agente encubierto en Villa Tranquila, situada en Avellaneda, una de las zonas más peligrosas del conurbano. Debido a que tenía que pasar inadvertido no tenía el chaleco antibalas. Igual que su compañera, Magalí Delgado.
Ambos policías estaban a bordo de un móvil no identificable, un Ford Focus, en la esquina de French y Gutiérrez, cuando fueron rodeados por un grupo de seis asaltantes que amenazaron a la oficial Delgado. Aparentemente, Sarmiento intentó defender a su compañera cuando le dispararon.
En ese momento, Sarmiento se identificó como policía. No le dieron tiempo a sacar su arma. Uno de los asaltantes le disparó un balazo a quemarropa. Murió desangrado en los brazos de su compañera. Según fuentes policiales, el homicidio de Sarmiento no estaría relacionado con el seguimiento del acusado de abuso.
Al menos dos equipos periodísticos que realizaban la cobertura informativa en la zona tuvieron que retirarse debido a las amenazas recibidas por parte de grupos de menores armados.
Anoche, efectivos de la comisaría de Avellaneda y de Dirección de Investigaciones local realizaban allanamientos en otro peli- groso asentamiento de la zona sur: la villa Itatí, en la localidad de Bernal.
Los responsables de la pesquisa tenían la pista de que en ese asentamiento situado a un costado del Acceso Sudeste se habían refugiado los asesinos del oficial Sarmiento.
Según fuentes policiales, el principal sospechoso del homicidio es un menor, identificado por el apodo Bodoque.
Después de matar a Sarmiento, los delincuentes huyeron con el arma del policía asesinado. Las cámaras de seguridad habrían registrado el paso de los sospechosos por la avenida Roca, luego tomaron por Debenedetti, hasta el Acceso Sudeste y desde allí se dirigieron a la villa Itatí.
Fuentes de la investigación indicaron que Sarmiento y su compañera habían sido asignados a la búsqueda de un acusado de apellido Rodríguez, acusado por presunto abuso sexual en la causa 07-02-015222, que se instruye en la fiscalía N° 3, de Avellaneda.
El jefe de guardia del Hospital Fiorito, Edgardo Di Chiaro, expresó que Sarmiento “llegó muerto con una herida en el tórax, con orificio de entrada y de salida”. Cuando el homicidio tomó estado público, sus colegas recordaron a Sarmiento, en las redes sociales. Lo describieron como un “excelente camarada que hace unas horas encontró la muerte mientras trabajaba”.