Palo Pandolfo cierra el círculo bien acompañado
Roberto Pandolfo escribió su primera canción a los 12 años. “Te hago una confesión: era en inglés”, me dijo hace ya una década. “Después nunca más lo hice, te lo juro”. De allí en más, no paró de componer: primero escribiendo letras sobre la música de canciones que le gustaban (“el segundo tema que escribí fue con la música de ‘Libros sapienciales’, de Vox Dei”), después, influenciado por los Beatles, compuso algunos temas beat, luego tomó el camino del rock de Pappo’s Blues y Pescado Rabioso y hasta se probó como autor hippie. Entonces, a mediados de los años 80, cambió su cabeza una vez más y armó una banda “moderna” (“la primera canción que hice para Don Cornelio se llamaba ‘No’”). Fue con ese grupo, Don Cornelio y La Zona, que Palo ingresó por primera vez a un estudio de grabación, en 1987, y con Andrés Calamaro como productor.
Esta fecha es la que Palo Pandolfo tomó como excusa para celebrar en su nuevo álbum, El
vuelo del dragón. Un registro en vivo que recorre los 30 años de grabaciones y transformaciones, acompañado ahora por su banda La Hermandad y con varios invitados amigos.
De rockero oscuro con espíritu pop y esencia punk en Don Cornelio al psicodélico de raíz rioplatense de Los Visitantes; de cantor criollo a tanguero revolucionario y otra vuelta al rockero con las venas abiertas. Las transformaciones de Palo marcaron su obra musical y la de toda una generación de jóvenes músicos que hoy se desparraman a lo largo y a lo ancho del arco musical argentino, desde el rock de vanguardia al tango y de los cantautores a las bandas de neopsicodelia.
“En treinta años hay muchos cambios en una persona. Yo veo que siempre estoy apuntando a algo similar, pero lo que va cambiando es el cuerpo. Qué hacés vos con el cuerpo, como depositario de la energía, qué hacés con la energía. Yo antes practicaba el conocimiento de abismos, pero con los años pude atrapar ideas. Hace muchos años escribí: ‘Cuando la vida deja de ser un comenzar, deja de ser vida’. Siempre vamos por más, hay que dar una vuelta de tuerca y evidentemente mi vida es así”.
Esta noche toca Palo y no me lo puedo perder. Junto a La Hermandad volverá a la escena del crimen (el espacio Xirgu-Untref, Chacabuco 863, donde grabó el disco en vivo en junio de este año) y a partir de las 21 repasará su extenso y siempre conmocionado repertorio. Por su parte, El vuelo
del Dragón tendrá primero una edición digital, separada en tres partes/temporadas (los primeros siete temas ya están disponibles y los próximos llegarán en enero y abril del año próximo) y luego sí, tendrá una edición física con un box set “para coleccionistas” que incluirá CD+DVD+ memorabilia de todos estos años de locura al palo.