Un enclave superpoblado devastado por las guerras y la pobreza
Controlada por Hamas, Gaza sufre escasez crónica de agua y suministros
CIUDAD DE GAZA (AFP).– La Franja de Gaza, controlada por el grupo islamista Hamas e inmersa en un enfrentamiento con Israel desde hace años, es un enclave palestino pobre y superpoblado sometido a un bloqueo muy severo.
Limitada al norte y al este por territorio israelí, al oeste por el mar Mediterráneo y al sur por Egipto, la Franja de Gaza es un pequeño territorio de 362 km2 con dos millones de habitantes.
Luego de la guerra de 1948-1949 que estalló a raíz de la proclamación del Estado de Israel, Gaza permaneció bajo la administración de Egipto sin ser jamás anexionada. En junio de 1967, la Franja fue ocupada por Israel.
El 12 de septiembre de 2005, Israel sacó a su último soldado en el marco de un plan unilateral de retirada, tras evacuar y desmantelar varios millares de colonias, consideradas ilegales por la comunidad internacional.
En junio de 2006, Israel impuso un bloqueo terrestre, aéreo y marítimo en la zona, tras el secuestro de uno de sus soldados. Un año más tarde lo endureció aún más, mientras que Hamas se hizo con el poder en Gaza.
Desde 2013, Egipto mantiene cerrado casi de forma permanente el puesto fronterizo de Rafah, la única entrada a la zona que no está bajo control de Israel.
Desprovista de recursos naturales, la Franja de Gaza sufre una escasez crónica de agua y de combustible. El desempleo afecta al 53% de la población, de la que más de dos tercios depende de la ayuda humanitaria.
En octubre pasado, Qatar, bajo el auspicio de la ONU y con el acuerdo de Israel, financió la entrega de combustible destinado a la única central eléctrica del territorio.
Este mes, Israel autorizó a Doha el envío de 15 millones de dólares para pagar los salarios de los funcionarios.
Desde el 27 de febrero hasta el 3 de marzo de 2008, Israel llevó a cabo la operación “Invierno caliente” tras la muerte de un israelí por un lanzamiento de misil. Más de 120 palestinos murieron.
Luego, en diciembre de 2008, Israel lanzó una amplia ofensiva aérea y terrestre para poner fin a los lanzamientos de misiles (operación Plomo Fundido). El 18 de enero del año siguiente, un alto el fuego entró en vigor, después de que 1440 palestinos y 13 israelíes murieran.
En noviembre de 2012, el ejército israelí lanzó la operación Pilar Defensivo con el asesinato selectivo del jefe militar de Hamas, Ahmed al-Jabari, al que siguieron ocho días de ataques aéreos que provocaron la muerte de 174 palestinos y seis israelíes.
En julio de 2014, Israel puso en marcha la operación Margen Protector para terminar con los lanzamientos de misiles y destruir los túneles cavados desde el enclave palestino.
Aquellos enfrentamientos causaron 2251 muertes del lado palestino y 74 del israelí.