La Ciudad y la provincia, con problemas para pagar el bono
El gobierno porteño lo descartó; a Vidal le resulta imposible cumplir con los plazos que fijó la Nación
Paradójicamente, los dos principales distritos gobernados por Cambiemos no tienen previsto pagar el bono de 5000 pesos para compensar la inflación que el gobierno de Mauricio Macri dispuso por decreto.
En la ciudad de Buenos Aires el pago está descartado del todo. En la provincia Buenos Aires se sabe que no se pagará en los tiempos que prevé el decreto (la primera cuota en diciembre y la segunda en febrero), pero podría abonarse más adelante.
“Es muy prematuro para definirlo a nivel provincial: si bien el impacto de este bono sería en 2018, las provincias necesitamos un tiempo prudencial para evaluar las posibilidades y ser serios”, se atajó el ministro de Asuntos Públicos bonaerense, Federico Suárez, en declaraciones radiales.
En el gobierno de María Eugenia Vidal supeditan el pago del bono a dos factores: la recaudación de noviembre y la negociación con los docentes, cuya paritaria sigue abierta y sin resolución. La gobernadora tiene previsto volver a reunirse con los gremios en diciembre y apuesta a contar con el bono como carta de negociación para poner sobre la mesa en el nuevo cara a cara con los maestros. Por eso, no habrá definiciones sobre el posible pago de la suma extra hasta que ese nuevo capítulo de la trabada negociación con los docentes esté en marcha.
El ministro de Economía bonaerense, Hernán Lacunza, irá hoy a la Legislatura para presentar el presupuesto del año próximo. Es probable que deba responder sobre el bono para los estatales de la provincia.
En la Ciudad, el panorama es más claro. El bono no se pagará. Lo sugirió ayer el propio Horacio Rodríguez Larreta, en declaraciones a América 24. “Vamos a acompañar la inflación. Si el bono es la mejor medida, no lo sé”, deslizó el jefe de gobierno.
Fuentes del gobierno porteño consultadas hoy por la nacion fueron más tajantes: “Por el momento, la Ciudad no tiene previsto implementar el bono de fin de año. No está en la mesa de negociación”. Enseguida, recordaron que la paritaria de los estatales fue ajustándose a lo largo del año a través de la cláusula de revisión.
El acuerdo inicial entre la administración porteña y los empleados públicos fijó un aumento del 12%, incluso por debajo de la que, por entonces, era la pauta de inflación que preveía el Gobierno. La paritaria se reabrió en julio, cuando sumó una suba del 3% y nuevamente en septiembre, mes en el que se fijaron otros tres aumentos de 5% para ese mes, octubre y noviembre. El ajuste alcanzó así el 30%, al menos 10 puntos por debajo de la previsión de inflación de este año. En la Ciudad no descartan que la negociación deba reabrirse nuevamente.
En Córdoba, el gobierno provincial comenzó a negociar con los gremios estatales el aumento pendiente para los dos últimos meses del año. Hasta octubre la suba acumulada es del 32% con cláusula gatillo ya aplicada. La provincia evalúa una alternativa: canjear el pago del bono por la vigencia de la cláusula de revisión. La municipalidad de la ciudad de Córdoba, en tanto sostiene la negativa al bono.
En el resto del país son mayoría las provincias en las que los estatales no cobrarán el adicional de $5000. En 13 distritos (Jujuy, Salta, Tucumán, Catamarca, San Juan, Mendoza, Neuquén, Santa Cruz, Chaco, Corrientes, Santa Fe, Entre Ríos y Chubut) no habrá bono, aunque en algunas está previsto que los salarios se actualicen vía cláusula gatillo. En las otras ocho sí se pagará el plus.