el espacio que invita a romper todo y liberar el estrés
Guido Dodero es coach ontológico y quería ofrecer un servicio que le permitiera incomodar a los demás, sacarlos de su rutina y ponerlos en contacto con sus emociones desde lo físico. En esta búsqueda es que surgió The Break Club, un espacio ubicado en el barrio porteño de Colegiales en el que, sencillamente, cualquiera puede ir y romper cosas para liberar el estrés.
Muchos se acercan después del horario de oficina. Al llegar, son recibidos en un living con un ambiente más ligado al de un
after office. Luego, se los hace pasar a un espacio que se denomina dressing room en el que se sacan su vestimenta ejecutiva y se ponen el “uniforme breaker” que consiste de un mameluco, guantes y casco de seguridad. Luego, se les da un bate de béisbol y al ritmo de AC/DC empiezan a destruir vajilla, electrodomésticos viejos, en definitiva, todo lo que se les interponga en el camino en un ambiente especialmente diseñado para eso.
“No existía nada parecido”, sostuvo Dodero, quien también destacó cómo es el proceso que vivieron muchos de sus clientes. “Todos llegan con mucho entusiasmo y ganas de romper, pero cuando ya están preparados con el bate en la mano y arranca la música les agarra una cosita en el fondo”, destacó.
Dodero explicó que esa sensación está directamente vinculada a la conexión física que los seres humanos tienen con sus emociones. “La experiencia pasa a ser un disparador de todos los sentidos. The Break Club termina siendo una experiencia más física de lo que se cree”, aclaró, y agregó que el trabajo con el cuerpo ayuda a generar un
reseteo mental para volver a las raíces. “Se trata de ver qué siento y qué me pasa con esa adrenalina”, explicó.
Al espacio ya se acercaron tanto grupos de amigos y familiares como equipos de trabajo que organizan la experiencia en particular para realizar trabajos en equipo o bien liberar el estrés después de concretar un proyecto importante. El final de la experiencia de The Break Club se da en un espacio tranquilo, que tiene como objetivo bajar las revoluciones y generar un ambiente ameno de descanso para los participantes.