Apuntan contra una fiscal por “imaginar” el femicidio de Lucía Pérez
Los jueces marplatenses calificaron de “mentira” la hipótesis que sostenía la tortura de la adolescente
MAR DEL PLATA.– Ni femicidio ni abuso sexual. La muerte de la adolescente Lucía Pérez, una de las causas que más expectativas y conmoción generaron en casos de violencia de género, se quedó en condenas para dos de los tres acusados, pero solo por venta de estupefacientes agravada.
Los jueces desestimaron la hipótesis que apuntaba a la violación y el sufrimiento de la víctima hasta provocar su deceso, y la atribuyeron a lo que denominaron “versión Sánchez”, en referencia a la fiscal original de la causa. El tribunal cuestionó a esa representante del Ministerio Público y pidió que sea investigada por incumplimiento de deberes de funcionario público.
“La fiscal (María Isabel) Sánchez movió a un país. Y movió a un país a partir del dolor y del horror derivados de una mentira”, señaló en el fallo el juez Facundo Gómez Urso, que la acusó de haber presentado casi de inmediato y en conferencia de prensa “un hecho atroz” que “no hizo más que provocar indignación”.
“Expuso sin ningún tipo de tapujo que la menor Lucía Pérez había fallecido producto de una agresión sexual inhumana provocada por un empalamiento anal, despertando de esa manera una serie de reacciones de lo más dolorosas, fundamentalmente para los padres de la menor, que hasta el día de hoy tienen que llevar a cuestas esta horripilante historia surgida de la propia imaginación de Sánchez”, afirmó, por su parte, el juez Aldo Carnevale al apuntar al informe que la funcionaria del Ministerio Público realizó ante la prensa cuando esta causa daba los primeros pasos.
El tribunal oral en lo criminal, que completa Pablo Viñas, expuso que desde entonces “Lucía pasó a ser sinónimo de empalamiento” y se preguntó “quién puede quitarse semejante imagen de su cabeza”.
Fuertes críticas
Gómez Urso cuestionó, además, que Sánchez no fuese al lugar del hecho ni a la comisaría a tomar las primeras medidas del caso. También indicó que la fiscal no recorrió la zona que vinculaba los domicilios de los tres imputados para confirmar o descartar datos.
En el repaso de quejas, el juez agregó que Sánchez no fue a ningún allanamiento ni a la autopsia y que “se fue de vacaciones” a los pocos días de promocionar un caso de “muerte de una adolescente de 16 años por empalamiento con un sufrimiento inhumano”.
El juez Gómez Urso criticó a la fiscal, además, al señalar que esta ni siquiera fue al debate oral a sostener su hipótesis. Y se preguntó el magistrado: “Si un caso así no la impulsó a comprometerse personalmente, ¿cuál la impulsaría?”.
Sánchez era la fiscal de turno cuando el 8 de octubre de 2016 se conoció la muerte de Lucía Pérez. Pocas horas después convocó a medios locales y nacionales –en ese momento se encontraban en la ciudad enviados de prensa por el Coloquio de IDEA– para describir un caso de violación seguida de muerte, que relacionó con el dolor sufrido por la menor ante semejante violencia.
“Si la fiscal Sánchez se hubiese desempeñado con compromiso, vocación, profesionalismo, competencia e idoneidad, este proceso no habría generado en la sociedad la expectativa de una condena ejemplar ni obligado a los operadores judiciales a dar explicaciones forzadas por algo que jamás sucedió como ella lo anunció”, insistió Gómez Urso.
El mismo juez advirtió que si los hechos hubiesen ocurrido “del modo imaginado” por la fiscal, “no caben dudas, y este tribunal ha dado muestras de ello, de que hubiésemos impuesto severas penas, notoriamente incrementadas por las circunstancias agravantes derivadas del “relato” de Sánchez”.
Además, los jueces se anticiparon a las críticas y apuntaron que “una absolución en tal escenario (el planteado por la fiscal) se vería como una injusticia, propia de jueces garantistas”.
Los magistrados ordenaron que se remitiese copia de este fallo a la Procuración General bonaerense para que se revise el trabajo cumplido por la fiscal Sánchez.
También se solicitó a la fiscalía general departamental que se determine si cometieron delitos la médica forense Claudia Carrizo –señalada en el fallo como “irreflexiva y poco profesional”– y el auxiliar José Luis Badami, definido por los jueces como “impresentable”.