LA NACION

El empleo privado cayó en septiembre por primera vez en más de un año y medio

La cantidad de trabajador­es bajó 0,6% anual; los sectores más afectados son el campo y la construcci­ón; para el Gobierno, el mercado laboral aún “resiste”

- Francisco Jueguen Sofía Diamante

El peor momento de la crisis cambiaria fue también el peor para los trabajador­es. En septiembre, la cantidad de empleados privados registrado­s cayó interanual­mente por primera vez en más de un año, mientras –en simultáneo– el salario promedio real retrocedió un 9,6% en promedio, licuando más los golpeados bolsillos. Sin embargo, en el Gobierno confían en que la reapertura de varias paritarias, los bonos de fin de año y la desacelera­ción de la inflación en un marco de mayor estabilida­d macroeconó­mica podrán generar un piso para esta tendencia y revertirla en 2019, año de elecciones presidenci­ales.

De acuerdo con los datos del Sistema Integrado Previsiona­l Argentino (SIPA) analizados por la Secretaría de Empleo, que depende del Ministerio de Producción y Trabajo, la cantidad de trabajador­es en septiembre mostró una caída de 0,6% (35.600 menos) en el año. Se trata de la primera caída registrada para esa misma medida desde febrero de 2017.

“Es un momento difícil”, describió sobre lo ocurrido en septiembre –uno de los puntos álgidos de la corrida cambiaria– el encargado de las estadístic­as de empleo en la Secretaría de Trabajo, José Anchorena. “El empleo viene resistiend­o, pero vemos una caída en septiembre”, admitió el funcionari­o en una reunión con los medios. No obstante, aclaró frente a los retrocesos observados en la economía durante ese mismo mes que se trata de un mercado laboral inelástico. En ese sentido, remarcó que las expectativ­as de contrataci­ón, según la Encuesta de Indicadore­s Laborales (EIL), resucitaro­n muy levemente durante octubre.

“Hay datos que muestran el empleo a la baja, pero resistiend­o. Los empleadore­s pueden estar esperando una recuperaci­ón de la demanda”, se esperanzó Anchorena.

La EIL mostró una variación negativa del empleo en octubre de 1,6% y una caída mensual de 0,3% frente a septiembre. Sin embargo, en la medición que solo observa el interior del país, el mercado laboral mostró signos de relativa estabilida­d, lo que en Trabajo creen que tiene que ver con un rebote que será más evidente en actividade­s vinculadas al campo y a las economías regionales. Las expectativ­as de contrataci­ón mostraron una leve recuperaci­ón gracias a la tranquilid­ad cambiaria de octubre.

La evolución del trabajo asalariado en el sector privado registrado mostró una caída mensual des estacional izada de 0,3%, o sea, una merma de 20.400 trabajador­es. El sector que más retrocedió en septiembre fue agricultur­a, ganadería y pesca (-1,2%). Luego siguieron la construcci­ón (-0,9%) y la industria (0,6%). En la medida interanual, el sector manufactur­ero mostró un declive pronunciad­o de 3,4%. Todo lo contrario exhibió el número del sector de explotació­n de minas y canteras, que creció 0,4% mensual y 5,1% en la medida interanual. Es un sector vinculado a las inversione­s que se desarrolla­n en Vaca Muerta.

El total de los trabajador­es formales, incluyendo los públicos y los independie­ntes, también reflejó caídas. El cambio anual fue de -0,6% (70.000 empleados menos). Sin embargo, esta modificaci­ón tuvo que ver fundamenta­lmente con cambios en la situación contractua­l de los monotribut­istas sociales, según informaron en Trabajo. La variación mensual des estacional izada reflejó una baja de -0,2%, según el informe oficial.

Según la modalidad de ocupación, las principale­s caídas mensuales en el sector privado se dieron entre los autónomos (-0,5%) y los asalariado­s (-0,3%). Por otro lado, los funcionari­os de Trabajo destacaron que, por primera vez, las tasas de variación del empleo público son negativas y no ya de desacelera­ción del crecimient­o como venía ocurriendo desde el cambio de gestión. “Esto tiene que ver con el acuerdo fiscal con las provincias”, destacó Anchorena. Además mejoraron, por formalizac­ión, los números de los trabajador­es de casas particular­es.

Otro dato negativo fue el del salario, que ya muestra pérdidas mensuales por lo menos desde hace tres meses frente a la inflación. En septiembre, el mes con mayor suba de precios del año, los salarios reales promedio se redujeron interanual­mente 9,6%. En ese mismo mes, la caída acumulada de los últimos 12 meses del promedio salarial fue de 1,9% con relación a 2017. Según Trabajo, la masa salarial acumulada de los últimos 12 meses del conjunto de los asalariado­s privados en septiembre es 0,7% inferior a la correspond­iente al mismo período de 2017.

Sin embargo, ayer ya corría el rumor de que varias empresas de consumo masivo, sobre todo en el retail, se habían rebelado frente a la decisión de las cámaras empresaria­s del sector mercantil de dar nuevos aumentos salariales en momentos de recesión.

“Por parte de los súper, no existe acuerdo o desacuerdo con la paritaria; lo que sí hay es dificultad­es para pagarla, porque venimos con los balances de las cadenas en rojo y con caída de consumo ininterrum­pido desde marzo. Es por eso que este porcentaje, sumado al bono del Gobierno, resultará muy difícil de pagar”, dice Juan Vasco Martínez, director ejecutivo de ASU.

 ??  ??

Newspapers in Spanish

Newspapers from Argentina