Olvidarse de la gente
Después del golpe duro que sufrimos con la violencia y suspensión del Superclásico estoy seguro de que muchos hemos reflexionado y tenido una severa autocrítica del país en el que vivimos. Y que será el de nuestros hijos y de los nietos que vendrán. Seguimos pensando que somos los más vivos. Ventajeros y especuladores, eternos llorones contra el muro de los lamentos de la vida mientras nos encanta viajar al exterior, comprarnos el último teléfono y un auto importado para chapear en medio de miles de compatriotas que no tienen educación. De qué nos sirve, de qué nos servirá si ninguno de nosotros tenemos una buena calidad de vida. River-Boca solamente nos mostró lo que pasa todos los días en el país. no sé de qué nos sorprendemos. Y mientras reflexionaba cómo podríamos salir del pantano, me acordé de Singapur, un país pobre, una pequeña isla que se convirtió en un gigante asiático. invirtió en la gente, apostó a un sistema educativo de alta calidad, inclusivo. a un sistema judicial fuerte y transparente y que actúa con severidad. Y que con reglas claras logró sobrevivir y crecer. acá parece que a la política le encantó hacer ignorante a la gente, para matar o morir por un voto. Se olvidaron de ella, así de simple. River-Boca nos mostró la realidad del país de la ventaja, el acomodo, la ilegalidad, la zona liberada.
Ojalá sea un punto de inflexión y muchos empecemos a poner lo que hace falta para salir de nuestro pantano. Patrick Campbell Dni 11.650.509