En la última temporada, se registraron tres muertes en las playas

Entre las víctimas había un chico de siete años, que conducía el vehículo

MAR DEL PLATA.– Tres casos fatales se registraron durante la última temporada por accidentes con cuatriciclos en balnearios de la costa atlántica. En uno de ellos, murió un chico de siete años que, según el informe policial incorporado a la causa que investiga el hecho, en esos momentos estaba al volante de una unidad de 90 cc.

La trágica serie empezó a principios de diciembre pasado con la muerte del marplatense Hernán Mauro Robert. En ese momento, se pudo determinar que, al volante de un cuatriciclo, quiso saltar un médano en tierras privadas de Pinamar, próximas a la ruta 11. Sin embargo, se incrustó en la arena. Sufrió lesiones letales en el cráneo y también en el pecho. En esa zona, no llevaba protección para resistir el golpe que se dio contra el manubrio.

Poco antes de que terminara el año, murió el pampeano Agustín Rebol, de 18 años, que, en las denominadas Arenas Blancas de Monte Hermoso, circulaba en un cuatriciclo acompañado de su novia, Noelia Loto. La chica de 19 años resultó con lesiones importantes por las que tuvo que quedar internada en el Hospital Penna de Bahía Blanca.

Conmoción

Pero el que mayor impacto generó fue el incidente en que murió Franco Catanzaro, de 7 años y con domicilio en Bariloche. Estaba de vacaciones con su padre en Costa Esmeralda, un exclusivo barrio y balneario privado del Partido de la Costa, en el límite con Pinamar.

El informe policial ubica al chico al volante de un cuatriciclo Yamaha 90 cc que fue embestido por otro Yamaha Raptor de 600 cc que conducía Agustín Fabián Ciari, oriundo de la localidad de Quilmes. El joven, que tiene 23 años, afronta una causa judicial que tramita la Fiscalía de Mar del Tuyú, en la que se lo acusa por homicidio culposo.

El accidente, según surge de los peritajes, se habría dado en circunstancias en que Ciari y su vehículo avanzaron sobre un médano y saltaron para caer en un badén donde estaba el pequeño Franco, que resultó aplastado por el cuatriciclo mayor. El imputado, que aguarda la sentencia en libertad, alega que se trató de un choque frontal e insiste en su sobreseimiento.

En la nueva disposición, que busca reforzar los controles, se tuvieron en cuenta estos antecedentes.