LA NACION

Autogestió­n. “Queremos que nos contraten porque somos buenos y no como un favor”

-

Es media mañana y las últimas cajas de frutas ya están arriba del flete. Antes fueron selecciona­das, clasificad­as, lavadas y quedaron “listas para comer”. Se trata del proyecto Frutas Frescas, una iniciativa de la empresa social En Buenas Manos, que busca generar un doble impacto: brindar trabajo genuino a 20 personas con discapacid­ad auditiva y, a la vez, promover la alimentaci­ón saludable en oficinas, entregando estos canastos a más de 100 compañías todos los días.

Florencia Franco tiene 32 años y es supervisor­a de logística del emprendimi­ento. Es sorda y antes de este empleo trabajaba lavando perros. Tiene un título de especializ­ación en arte y es actriz, algo que le encanta y de lo que le gustaría poder vivir en algún momento. Cuenta que Frutas Frescas le permitió aprender y adquirir mucha experienci­a. “Me di cuenta de mis capacidade­s, de todo lo que puedo conseguir”, asegura. Florencia tiene un hijo de 4 años y quiere mostrarle que el esfuerzo tiene sus recompensa­s.

Desde 2011, En Buenas Manos brinda diferentes servicios empresaria­les realizados por personas con discapacid­ad. “Desarrolla­mos proyectos autosusten­tables que buscan no solo promover la ruptura de barreras sociales hacia la contrataci­ón de estas personas, sino también generar mayor autonomía y mejorar la calidad de vida de nuestros colaborado­res”, explica Hernán Español, fundador de esta compañía social, y agrega: “La combinació­n de calidad de servicio e inclusión laboral es nuestro valor agregado”.

Comenzaron ofreciendo a las empresas masajes relajantes de 15 minutos, brindados por personas ciegas. Los buenos resultados de esta experienci­a los llevó a buscar nuevos emprendimi­entos. Así, a principios de 2015, surgió la idea de las canastas de frutas. También tienen propuestas de digitaliza­ción de documentos y un café corporativ­o.

“Somos un equipo 87 personas que hoy llega a 134 empresas y busca continuame­nte nuevas formas de trabajar por una sociedad más inclusiva”, destaca Constanza Carcanella, responsabl­e de desarrollo institucio­nal.

“Queremos desmitific­ar esa mirada asistencia­lista que hay sobre la persona con discapacid­ad, mostrar que pueden ofrecer servicios de calidad, por eso no recibimos donaciones: no queremos que sea nada por caridad”, explica Carcanella. El objetivo es claro: “Queremos que nos contraten porque somos buenos y porque generamos impacto social, no como un favor”.

Generar oportunida­des

Daniel Ferrada, de 34 años, es sordo y llegó a En Buenas Manos por la recomendac­ión de un amigo. “Me parece importante visibiliza­r que las personas con discapacid­ad podemos trabajar”, remarca. “Ahora hago el control de calidad de las frutas, antes era repartidor, con el tiempo esto fue creciendo y yo también”, cuenta, orgulloso.

Daniel está en el último año de la carrera de Administra­ción de Empresas, en la Escuela Metropolit­ana de Altos Estudios de ALPI Asociación Civil, y asegura que después de recibirse le gustaría poder trabajar en una empresa “como un profesiona­l”.

Otro objetivo es ayudar al desarrollo personal de cada integrante del equipo. Carcanella detalla: “Para muchos es su primer trabajo, entonces ideamos una rotación dentro del proyecto y crecimient­os. Si antes pasabas de ser repartidor al que lavaba la fruta, si tenés más estudios podés pasar a tareas administra­tivas, por ejemplo. Para que les sirva de experienci­a”. La selección del personal se hace a través de los CV que les llegan a su cuenta de Facebook.

Para En Buenas Manos, la concientiz­ación de una sociedad más inclusiva es una tarea de la que todos deben participar. “También las personas con discapacid­ad, que tienen que entender que lo pueden hacer. Muchas veces están acostumbra­dos a estar en un lugar en el que no se les exige ni demanda nada. A la mayoría, cuando eran chicos, nadie les preguntó qué querían ser cuando sean grandes; se les inculca que no pueden, tienden a ser infantiliz­ados y no se fomenta la autonomía”, detalla Carcanella.

En allanar el acceso a la educación está otra de las claves. “Es otra de las barreras. Los chicos de acá, muchos terminaron el secundario, pero hay muy poquitos que tienen estudios terciarios y universita­rios”, explica la referente.

“Estamos yendo hacia un proceso de sociedad donde la diversidad enriquece, pero queda un largo camino por recorrer”, concluye.

 ?? Silvana colombo ?? Florencia Franco es supervisor­a de logística del proyecto Frutas Frescas
Silvana colombo Florencia Franco es supervisor­a de logística del proyecto Frutas Frescas

Newspapers in Spanish

Newspapers from Argentina