DE LOS LECTORES

Cartas & mails

Esperando un cambio

Este año se cumplen 70 de la firma de la Declaración de Derechos Humanos, por lo que hoy se conmemora el Día Internacional de los Derechos Humanos. Quienes suscribimos esta carta somos hijos, hermanos, padres, esposas de víctimas del terrorismo que en la década del 70 sufrimos el salvaje ataque de Montoneros, ERP, OCPO, FAL, FAR y otras organizaciones armadas que pregonaban un mundo mejor, pero que en los hechos regaron de sangre inocente nuestro país.

A más de 40 años de los hechos seguimos esperando que el Estado argentino se acuerde de nuestros seres queridos, los reconozca, nos otorgue los derechos a la verdad, la Justicia y la reparación, y termine con 40 años de impunidad, violencia y parcialidad en el relato histórico. Seguimos esperando un cambio, seguimos esperando que la clase política tenga la valentía de romper con el no te metas, seguimos esperando que nuestros familiares tengan el sitial de honor que merecen y dejen de ser ocultados para no incomodar a quienes sin ningún reparo asesinaron, secuestraron, robaron, hirieron y lastimaron a toda una Nación. Ana Lambruschini; Arturo Larrabure; Santiago, Verónica y Alejandro Soldati; Mirta Virán; Raúl y Ruth Duarte Ardoy; Isaac Barrios; Marina Klein y siguen las firmas

El falsificador

En relación con la exposición virtual de obras de Vermeer comentada el martes en la edición online de la nacion, puede ser interesante recordar el escándalo que envolvió la obra de este pintor holandés tres siglos después de su muerte. Al terminar la Segunda Guerra Mundial, otro pintor holandés de apellido Van Meergeren fue acusado de colaboracionismo por haberle vendido obras de Vermeer al líder nazi Hermann Göering. El acusado argumentó en su defensa que lo que había vendido eran obras suyas y no de Vermeer: las había falsificado.

Van Meergeren estudió durante años el estilo de Vermeer para poder imitarlo. Obtenía los lienzos lavando obras de igual antigüedad pero de menor valor, fabricaba los pigmentos con las mismas técnicas que los maestros del Renacimiento y envejecía artificialmente sus obras calentándolas en un horno.

Para probar su inocencia, Van Meergeren pintó “un Vermeer” ante el tribunal. Fue absuelto de la acusación de colaboracionismo y condenado a un año de prisión por falsificador. Murió poco tiempo después, mientras cumplía su condena.

Claudio H. Sánchez claudiofisicamente@yahoo. com.ar

Rugby infantil

La práctica del rugby infantil trasciende lo deportivo, además de constituir una cantera de jugadores para los planteles superiores. Los entrenadores transmiten, a sus dirigidos, importantes valores que resultan inalterables para el resto de sus días. Es el espíritu del rugby.

Se les inculca el respeto hacia los árbitros, con el convencimiento de que sus decisiones son indiscutibles; el compañerismo; el reconocimiento hacia la hinchada que, en días agradables o desapacibles, los acompaña y alienta; camaradería con los contrarios, con quienes confraternizan en los terceros tiempos; agradecimiento al club que los cobija. Pero también, los padres y los mayores se imbuyen de valores tales como no reprochar a sus hijos o sus compañeros por errores involuntarios en el desarrollo del juego; no reprobar las decisiones de los árbitros; no discriminar a quienes “no juegan bien”; no priorizar el resultado por sobre la diversión; no presionar a entrenadores, y no incurrir en tantas otras actitudes disonantes con la práctica de todo deporte.

Roberto A. Meneghini dr.meneghini@hotmail.com

Aristocráticas

Con relación a la nota publicada el 6 del corriente (“La ruta de las residencias aristocráticas de la ribera norte”) deseo efectuar dos rectificaciones: la Quinta Los Ombúes de San Isidro no fue adquirida a la mu-

nicipalidad local por la familia Beccar Varela, sino donada al municipio por el Dr. Horacio Beccar Varela; el himno nacional no fue ejecutado por primera vez en esta quinta, sino en la residencia porteña de Mariquita Sánchez.

Arq. Marcela P. Fugardo

DNI 18.580.872 A propósito del piquete en la zona de Constitución, escuché a varios referentes de movimientos sociales quejarse por la “represión del Gobierno”, porque –según ellos– la policía no les permitía avanzar desde la Plaza Constitución hacia avenida Belgrano. Yo les pregunto a todos esos patoteros: ¿a quién se queja un ciudadano “de a pie” que tampoco pudo desplazarse por la avenida 9 de Julio a causa del piquete? Los piqueteros reclaman y se quejan porque no los dejan caminar libremente por la calle, pero ellos mismos impiden por la fuerza que el resto de la ciudadanía pueda transitar por la misma avenida.

Así de absurdo.

César Monicat moc26@live.com.ar

Blanqueó, pero...

La AFIP-Agencia 16 inició un juicio contra mi persona por intereses que fueran condonados por la ley de blanqueo, en el año 2015. El monto demandado es de $7256,03, más intereses por $1088,4. Nunca recibí notificación alguna tanto de parte de la AFIP como del Juzgado Federal 2 en lo Civil y Comercial Contencioso Administrativo que lleva dicho juicio. Hace poco más de un mes, al comenzar la transferencia de una motocicleta, que vendí, esta fue observada, y así me entero de que pesa sobre mí una inhibición general de bienes, que fuera ingresada el 26/2/18. La fecha de condonación de la deuda es el 15/3/2017 y la inhibición ingresa en forma posterior, un año después. Por si fuera poco me entero por casualidad y por un tema menor, pero se ve que la igualdad ante la ley es una quimera, y se comprueba una vez más que las instituciones, cuando funcionan a esta velocidad, y en la oscuridad, no hacen más que entorpecer la vida de los ciudadanos.

Luego de demostrar que no tengo deuda alguna, sigo a la espera del levantamiento de dicha inhibición,

Jorge Cazenave

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