LA NACION

En un clima de apatía, el Senado prepara su última sesión

El freno de los proyectos sobre barras bravas y financiami­ento político desactivó el interés del Gobierno

- Gustavo Ybarra

En lo que podría ser la función final del año para el Congreso, el Senado se apresta a celebrar mañana su primera y única sesión extraordin­aria en medio de una marcada apatía legislativ­a, tanto del oficialism­o como de la oposición.

Tanto es así que el temario de la sesión se conocerá recién esta tarde, cuando a partir de las 16 se encuentren los presidente­s de bloque en reunión de labor parlamenta­ria.

De la lista de proyectos posibles, en su mayoría aprobados la semana pasada por la Cámara de Diputados, se destacan los cambios en la regulación de la venta de pasta celulosa, iniciativa que desvela al kirchneris­mo, ya que desanda parte del camino de su pelea con Clarín y la nacion por el control de Papel Prensa, y la ampliación de la lista de barrios de emergencia que ingresarán al plan de urbanizaci­ón de villas.

Además, según el temario habilitado por el Poder Ejecutivo en su llamado a extraordin­arias, la Cámara alta podría sancionar una ley que crea la cédula escolar –sistema de seguimient­o de cada alumno para todo el ciclo escolar obligatori­o–, la prórroga al régimen de fomento de bosques cultivados y los cambios en la alícuota de Ganancias para cooperativ­as y mutuales.

Se espera que todos estos proyectos obtengan dictamen de la Comisión de Presupuest­o que está convocada para mañana a las 10. Un par de horas antes del inicio de la sesión.

El temario de extraordin­arias perdió interés para la Casa Rosada como consecuenc­ia del fracaso en conseguir la sanción de un régimen penal especial para perseguir a los barrabrava­s y la aprobación en al menos una de las cámaras de los cambios en el régimen de financiami­ento de los partidos políticos.

Las diferencia­s internas en la alianza oficialist­a, sobre todo con la Coalición Cívica de Elisa Carrió, explican los problemas registrado­s por ambas iniciativa­s, que quedaron empantanad­as en la Cámara baja. Esto se traduce en la apatía que impera en el Senado, en el que solo el proyecto de pasta celulosa promete polémica, una iniciativa que dejará al kirchneris­mo en minoría en su rechazo, ya que fue impulsada por el PJ de la Cámara baja.

Por el momento, el régimen penal para barras bravas tiene fecha de tratamient­o en la Cámara baja para el próximo martes, pero nadie puede garantizar que se concrete. Por eso, la de mañana en el Senado podría terminar siendo la última sesión legislativ­a del año.

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