Sin gestos de Cristina, Rossi avanza con su plan presidencial
Cerró ayer una actividad en la Capital y el sábado se lanza con un acto en Rosario
Agustín Rossi lo aclara a quien se lo pregunte: si Cristina Kirchner anuncia finalmente su candidatura, en ese mismo instante él dejará de lado sus aspiraciones presidenciales y se pondrá a disposición de la campaña de la expresidenta. Mientras eso no suceda, el jefe del bloque de diputados del Frente para la Victoria (FPV) mantendrá su postulación, con la idea de convertirse en el mejor candidato del kirchnerismo, con la mira puesta en una hipotética PASO de la oposición.
Con ese plan de acción, Rossi intensificó en el último tramo del año sus apariciones públicas. Con el Congreso a punto de cerrarse como vidriera, ayer encabezó un acto por el 35° aniversario del regreso de la democracia, en el que dirigentes políticos y sociales que apoyan su candidatura rindieron homenaje a la presidenta de las Abuelas de Plaza de Mayo, Estela de Carlotto.
La actividad fue la previa del acto que Rossi encabezará el sábado, en Rosario, una suerte de lanzamiento de su candidatura. #HayOtroCamino es el hashtagconsigna que usó el diputado ayer, que usará el sábado y que empieza a instalarse con fuerza como lema de la campaña kirchnerista. La pronunció por primera vez Cristina, durante su discurso en la cumbre de Clacso, en Ferro.
“La democracia tiene que volver a ser la voz de la mayoría”, sostuvo ayer Rossi, en el ND Teatro, y afirmó que desde que gobierna Mauricio Macri, “los beneficiados son las minorías configuradas por grandes corporaciones y especuladores financieros”.
El encuentro tuvo como coordinadores a dos referentes del kirchnerismo porteño que promueven la candidatura de Rossi: el diputado Daniel Filmus y el exdiputado Carlos Heller, presidente del Partido Solidario.
Los dos lo miraron desde la primera fila, junto con Carlotto, Mempo Giardinelli, Mercedes Marcó Del Pont, Juan Cabandié y la diputada Vanesa Siley.
En tono de campaña, Rossi los llamó a “reconstruir una Argentina basada en el trabajo, el crecimiento y la justicia social”, a partir de la construcción de “un gran frente opositor dispuesto a recuperar un país para todos, que le devuelva la esperanza al pueblo”.
Sin desafiar el liderazgo de Cristina, buena parte de los dirigentes que estuvieron ayer en el ND Teatro se imaginan a Cristina más como armadora del frente opositor que como candidata. Si ella no juega, dicen, se abre la posibilidad de una gran PASO opositora que incluya, incluso, a Sergio Massa.
Otro competidor
Más cautos, cerca de Rossi imaginan una competencia interna con Felipe Solá, Alberto Rodríguez Saá y Daniel Scioli. En ese esquema hay lugar para un solo postulante del kirchnerismo puro. Aunque El jefe de los diputados del FPV es el que lleva más camino recorrido con ese objetivo, otros en el kirchnerismo no descartan como candidato alternativo a Axel Kicillof. Argumentan que es el que retiene el mayor porcentaje de voto propio.
El exministro de Economía concentra sus actividades en la provincia de Buenos Aires, con la idea de convertirse en la contracara de la gobernadora María Eugenia Vidal, pero sigue con atención las encuestas nacionales de intención de voto.
Antes del fin de semana, Rossi tendrá otra parada intermedia: participará, en la sede del Instituto Patria, de la presentación de Ajustados – De la revolución de la alegría al crecimiento invisible, un libro de Carlos Heller y Diego Rubinzal.
“Hay otro camino” es también el título que Rossi presentará la semana que viene, una suerte de plataforma de gobierno, con tres ejes: la justicia distributiva, el crecimiento nacional y el empleo argentino.
Pese a que la relación del diputado con la expresidenta y con su entorno es muy buena, el diputado avanza a ciegas. Cristina no comparte su estrategia ni con la almohada, coinciden los que la conocen bien. Su ADN permite pronosticar que mantendrá la incógnita hasta el final. A los que la visitaron en las últimas semanas, les dijo que hará todo lo que sea necesario para derrotar a Cambiemos.