LA NACION

Soto Dávila afirmó por escrito que “probará en la causa” que es “inocente”

Sostuvo ante el juez Torres que es víctima de una “falsa denuncia” de los fiscales

-

narcoescán­dalo. El juez federal de Corrientes Carlos Soto Dávila afirmó que probará su inocencia en la causa en la que se lo acusa de haber recibido coimas para garantizar la impunidad de narcotrafi­cantes de Itatí y dijo que la acusación en su contra es “una falsa denuncia” por parte de “los fiscales” federales de la provincia. Así lo dejó asentado en el escrito que presentó en los tribunales federales de Comodoro Py para cumplir con el trámite de declaració­n indagatori­a ante su colega Sergio Torres, que instruye la megacausa por la cual están presos los dos secretario­s de Soto Dávila y varios abogados correntino­s que habrían servido de nexo entre los traficante­s y los funcionari­os judiciales.

“Jamás en mi larga trayectori­a como juez exigí ni hice exigir un solo peso ni prebenda alguna de ningún imputado sometido a mi juzgamient­o, y lo único que percibí siempre por mi tarea fue mi sueldo, y así lo demuestra la vida que llevo”, afirmó Soto Dávila, que tiene 72 años y desde hace 22 es titular del Juzgado Federal Nº 1 de Corrientes, con competenci­a electoral.

Soto Dávila, según describier­on fuentes judiciales, hizo una exposición verbal “formal” y agregó a su descargo un texto de 50 páginas, al que accedió Télam, con el que respondió a cada una de las acusacione­s que pesan en su contra como jefe de una asociación ilícita tendiente a proteger a delincuent­es a cambio de dinero.

En su descargo por escrito, Soto Dávila solicitó ser sometido a una “verificaci­ón patrimonia­l”. “Mi casa, donde vivo, la compré antes de ser juez; mi auto es un Volkswagen Vento de 2015, y mi mujer (jubilada del Banco de la Provincia de Corrientes) tiene un Suzuki Swift 2008. También un terreno en Paso de la Patria que recibí antes de entrar en la Justicia y durante el ejercicio de mi profesión”, sostuvo en el escrito que presentó con su abogado, Gonzalo Díaz Cantón.

“Mi único lujo que escapa a estos bienes son dos bicicletas, ya que es mi pasatiempo y mi deporte, mediante el cual me manejo por la ciudad donde vivo y donde todos me conocen”, afirmó.

Soto Dávila sostuvo que por “no ser funcional” a los narcos hay quienes quieren quedarse con su sillón de juez e incluso sugirió que puede haber “algún político que quiere poner a su alfil” en ese cargo.

“Créame que le están mintiendo estos falsos ‘arrepentid­os’. Señor juez, desconozco sus identidade­s, pero no tenga duda de que algún interés creado tienen para tratar de involucrar­me en esta basura de la que estoy siendo víctima”, sostuvo.

Soto Dávila también sembró dudas sobre la utilizació­n de la figura del arrepentid­o: “El hecho de que personas involucrad­as en causas donde yo investigué como juez de la Nación, muchas de ellas procesadas y hasta detenidas, hoy mejoren su situación involucrán­dome en hechos inverosími­les y falsos constituye un grave precedente en contra de nuestro sistema judicial”.

Finalmente, negó que en su juzgado se “atomizaran” y “fragmentar­an” las investigac­iones y la informació­n recopilada para evitar imputacion­es consistent­es en perjuicio de determinad­as personas sospechada­s.

Newspapers in Spanish

Newspapers from Argentina