LA NACION

Real madrid, goleado poco antes de viajar al mundial de Clubes

Cska moscú le ganó 3-0 en el Bernabéu; si bien no jugó completo, su imagen es más débil

- Claudio Mauri

Hubo varios suplentes, el equipo ya estaba clasificad­o a los octavos de final y solo una catástrofe deportiva –no se consumó porque Roma perdió con Viktoria Plzen– podía quitarle el primer puesto del Grupo G de la Champions League. Todos esos atenuantes no invalidan la sensación de que River, en caso de darse en el Mundial de Clubes la final que normalment­e enfrenta al campeón europeo con el sudamerica­no, se puede encontrar con un Real Madrid más vulnerable y menos poderoso que el de hace un tiempo.

La impresión se refuerza tras el 0-3 ante CSKA Moscú –último de la zona– en el Bernabéu, en lo que fue la peor derrota como local en la historia de las copas europeas.

Alejandro Sabella, en la presentaci­ón de un libro sobre su biografía, comentó ayer: “Creo que se achicó la diferencia que había otros años. No es el Real Madrid que estamos acostumbra­dos a ver. Le puede venir bien a River”.

En la dura derrota contra el equipo ruso no estuvieron Sergio Ramos, Varane ni Modric. En el segundo tiempo, con la desventaja de dos goles, ingresaron Carvajal, Gareth Bale (terminó con una molestia en un tobillo que no sería grave) y Toni Kroos. Fueron titulares Courtois, Marcelo, Benzema, Isco (silbado por los hinchas) el juvenil brasileño Vinicius, Asensio y otros dos jóvenes mediocampi­stas a los que Santiago Solari les viene dando continuida­d: Llorente y el uruguayo Valverde.

“Me hago responsabl­e”, dijo Solari, que hace poco reemplazó al destituido Julen Lopetegui. Si la silbatina que despidió al equipo no fue más estruendos­a es porque el Bernabéu registró una baja asistencia. “Me voy triste por el resultado. No fuimos contundent­es en el área rival ni en la nuestra. CSKA sí y ahí giró el partido. El segundo tiempo nuestro fue malo”, agregó el entrenador argentino.

Al margen del funcionami­ento colectivo, Real Madrid también parece extrañar el caudal de goles y la voracidad ofensiva de Cristiano Ronaldo, que, paradódica­mente, en Juventus marcó un solo gol en la etapa de grupos de esta Champions, cuando en las nueve que estuvo en Real Madrid sumó 55 y su registro más bajo fue de dos conquistas.

Antes de viajar a Abu Dhabi, Real Madrid enfrentará el próximo sábado a Rayo Vallecano por la Liga de España, en la que está cuarto, a cinco puntos del líder Barcelona. En tierra árabe esperará en semifinale­s por el ganador de Kashima Antlers (Japón)-Chivas de Guadalajar­a. Se verá si en los Emiratos Árabes Unidos vuelve a ser un equipo intimidant­e. Este Real Madrid, así como está, no asusta tanto.

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