Cruceros.

Ofrecen estímulos y apuntan al primer millón de pasajeros

Este miércoles arribó por primera vez al Puerto de Buenos Aires (PBA), el MSC Fantasía, que operará de forma regular con seis recaladas durante la temporada de cruceros, que se extiende hasta marzo de 2019. “La llegada de este buque con 4000 huéspedes es el reflejo de un trabajo de largo plazo con las autoridades de Turismo y Transporte, que nos permitieron marcar este itinerario con dos años de antelación”, cuenta Javier Massignani, director ejecutivo de la compañía.

El mercado de cruceros de Sudamérica es el segundo más importante detrás del Mediterráneo, que lidera el negocio de MSC, por eso Massignani afirma que “el foco está puesto en esta región” y elogia que un 60 por ciento del turismo es receptivo –principalmente proveniente de Brasil–, frente a un 40 por ciento emisivo.

Esta tendencia se enmarca en el plan que impulsa el gobierno nacional para alcanzar un millón de pasajeros en las próximas temporadas, que incluye una inversión de más de US$ 70 millones en puertos en todo el país, junto a una política de reducción de costos portuarios, algunas concesiones a las navieras y la desburocratización en las dependencias vinculadas.

Massignani agrega que se realizaron estudios en nuevos destinos como Mar del Plata, pero todavía no hay definiciones y marca que “la industria de turismo de cruceros está creciendo de forma exponencial y la Argentina no puede estar ajena a esa realidad”.

El lunes, el presidente Mauricio Macri visitó el Celebrity Eclipse, que llegó a Buenos Aires con 4500 turistas a bordo y, gracias a las modificaciones en el Código Aduanero, se transformó en el primer crucero que hizo su aprovisionamiento de mercaderías en el país.

Además de PBA, que en 2017 pasó de 81 a 99 recaladas con 328.700 pasajeros, los otros puertos preparados para recibir cruceros están ubicados en Ushuaia y Puerto Madryn, a donde llegaron 119.790 y 42.972 pasajeros respectivamente.

El Ministerio de Transporte de la Nación gestiona, controla y fiscaliza los cruceros del puerto porteño a través de la Administración General de Puertos (AGP), pero además, por pedido del Presidente, lleva adelante todas las gestiones de cruceros a nivel nacional.

Hasta ahora el mejor momento de los cruceros se registró entre 2012 y 2013, cuando llegaron a PBA 510.812 cruceristas y la cifra ascendió a 642.183 al contabilizar el resto de los puertos. En diálogo con la nacion, Gonzalo Mórtola, interventor de AGP, analizó las perspectivas del sector.

P –¿Esta temporada se superarán los 500.000 pasajeros?

R –Estamos próximos a superar el pico de 2012/2013 con 551.000 pasajeros este año, y después de todo este desarrollo, de la cantidad de barcos nuevos que vienen a nuestro país y que van a seguir viniendo, aspiramos a tener un millón de pasajeros en los próximos cuatro años.

P –¿Cuál es el circuito de los cruceros que llegan a la Argentina?

R –La gran mayoría de los cruceros visitan Buenos Aires, después se van a Puerto Madryn, Ushuaia y algunos a Punta del Este, Uruguay. Existe otro negocio de cruceros antárticos que van hacia Chile.

P –¿Qué ofrece al crucerista el puerto de la ciudad?

R –Es un destino al que todo el mundo quiere venir. Lo que tiene de bueno es que potencia no solo otros dos puertos argentinos, como son Madryn y Ushuaia, sino también la región: en Uruguay y Chile principalmente. Y ese es el objetivo, fortalecernos también junto a Brasil, porque nuestra competencia, que es Australia y Nueva Zelanda, trabaja en bloque. Hay un cúmulo de señales que le dimos al mercado que nos llevaron a que en el último Seatrade, que es la feria más importante de cruceros del mundo, todas las empresas nos dijeran que la Argentina es el buen ejemplo de la región.

P –¿Qué perspectivas hay con la nueva licitación del puerto?

R –Los puertos y la Hidrovía Paraná-Paraguay no son compartimentos estancos, ni aislados, van de la mano, por eso también es muy importante el trabajo que se está desarrollando en equipo porque los cruceros cada vez son más grandes, y si bien no calan tanto, el puerto se está preparando para el futuro de la misma manera que venimos trabajando con otras terminales. Dentro del Plan de Modernización se contempla un espacio (espigón 1) para el desarrollo de una Terminal Exclusiva de Cruceros multifunción, pero las características estarán sujetas a la aprobación de los proyectos presentados por las empresas. La concesión actual vence en diciembre de 2019, pero se firmó una ampliación del plazo hasta diciembre de 2020, con una importante reducción de la tasa por pasajero, de US$45,50 a US$20, lo que generará importantes ahorros para los cruceros que lleguen al Puerto de Buenos Aires.