Falta un programa
A las decisiones de la convención de la UCR encaminadas les falta la redacción de un programa político y una propuesta económica a compatibilizar dentro de Cambiemos y con otras fuerzas afines del arco republicano y democrático, porque su importancia es fundamental (como se probó cuando redactamos el programa de la Multipartidaria de 1981 y el programa de gobierno de 1983) para poder converger en la defensa del sistema, su gobernabilidad y la ampliación de la base de adhesión. El drama es estructural: la sustentación rural-energética no alcanza todavía para sostener el país y la solución urbana se asienta sobre una crecida burocracia e industrias con dificultades para competir internacionalmente. El desequilibrio demográfico traumático que nos impone la desmesura del conurbano, especialmente la franja Avellaneda-la Matanza hasta el Gran La Plata, solo es viable con subsidios que empobrecen a las provincias, las regiones y el Tesoro. Sin olvidar la cuestión educativa, el acceso laboral posible y previsional.
No hay partido sin programa, no hay gobierno de unión nacional sin programa de letra chica; no hay negociaciones convergentes serias sin el cómo y el para qué escritos; no hay horizonte sin la previsibilidad de un programa que fundamente la esperanza.
Roberto Rodríguez Vagaría
DNI 8.451.791