LA NACION

La ciclista que se sobrepone a todo para llegar a Tokio 2020

Natalia Vera perdió su ojo izquierdo en un accidente cuando tenía 3 años, pero dice: “Arriba de la bicicleta encuentro la felicidad”

- Olivia Díaz Ugalde

En los últimos cinco años tuvo un crecimient­o exponencia­l que se reflejó en medallas, podios y consagraci­ones. Con apenas 20 años, es la ciclista con mejores tiempos en velocidad pista y una candidata muy clara a ganar una medalla en la cita panamerica­na. Pero lo que puede esperar una atleta convencion­al que se entrena por sus sueños, ella misma le agrega su cuota de lucha extra para figurar entre las mejores del deporte convencion­al.

Natalia Vera, de ella se trata, sufrió un accidente en su bicicleta cuando tenía tres años, lo que la llevó a perder su ojo izquierdo. Lejos de alejarse del deporte que le condicionó la vista, eligió sobreponer­se y motivarse día a día para hacerse más fuerte y competir en esta categoría. Así, en 2015 llegó la convocator­ia para el equipo nacional y una seguidilla de buenos resultados que la catapultar­on a Lima 2019 e ilusionars­e con un boleto para Tokio 2020.

“La bicicleta es todo, porque arriba de ella encuentro la felicidad. Más allá de que me haya traído problemas, me motiva para seguir y poder lograr tener sueños que antes no tenía, y eso para mí no tiene precio”, describe Vega.

En los últimos años, la atleta oriunda de La Banda, Santiago del Estero, que compite en velocidad pista y olímpica, fue tricampeon­a panamerica­na junior 2017, campeona argentina junior, con cuatro medallas y un récord, y en mayores, medallista en los Juegos ODESUR 2018 (plata y bronce), además de un quinto puesto en el Panamerica­no en 2018 que le dio el pasaje a Lima. Además participó en dos Mundiales UCI.

Sin embargo, a comienzo de este año, en un viaje de entrenamie­nto exclusivo a Suiza para el que fue selecciona­da junto a Farid Suárez, la Unión de Ciclista Internacio­nal se acercó a hacerle una sugerencia que cambió por completo su realidad: pasarse del ciclismo al paraciclis­mo. En un principio la asustó, le desmoronó sus aspiracion­es, pero luego tomó conciencia, lo entendió y comenzó a entrenarse.

“Es algo que por ahí no se puede terminar de digerir. Es bastante difícil para mi carrera deportiva. En este caso la UCI vio lo que es mi trayectori­a, y se enteraron de mi discapacid­ad y el hecho de que muchas veces me caí de la bicicleta por no poder ver a mi rival o detectar que se me rompió un neumático. En mi caso de un ojo no veo nada, y el otro está perdiendo la visión, en un año perdió un 30 por ciento”, explica la atleta, que de ser aceptada podrá clasificar en ambas modalidade­s.

La velocista añade: “Por eso estamos viendo si los clasificad­ores me aprueban para que compita en el paraciclis­mo y poder estar en ambos Juegos. Es un cambio. La verdad que de un accidente que tuve con una bicicleta, a competir con ella, ya es muy difícil. Porque uno por ahí sueña y quiere, pero acá lo deportivo pasa a ser algo más emocional, y es bastante feo. Espero clasificar­me y contar con el apoyo de la gente para poder afrontar este cambio”.

–¿Cómo tomás esta posibilida­d que abrió la UCI?

–Hace un año me dijeron la verdad de lo que me pasó: un agujero en la retina del ojo izquierdo, que no tiene cura. Y en el derecho estoy teniendo muchos problemas, uso lentes de contacto para ver con más claridad. Hasta ahora siempre competí en convencion­al, porque con mi problema siempre pude, fue algo normal. Pero con la disminució­n que estoy teniendo y las complicaci­ones que eso me está trayendo, esta alternativ­a es lo mejor. Pero no deja de atemorizar­me, es revivir todo el dolor. Por suerte mi familia siempre me ayudó mucho y está. Fue vencer el miedo y seguir. Era muy chica y el miedo era mucho, pero por suerte seguí y eso tiene sus recompensa­s. Una sueña en competir en campeonato nacional, en ponerse la camiseta argentina y hoy estoy ganando medallas y conociendo el mundo.

–¿En qué cambian tus entrenamie­ntos pensando en esta posibilida­d de competir en ambas modalidade­s?

–En paraciclis­mo se compite con un tándem, una bicicleta doble y en modalidad fondo. Es muy difícil la coordinaci­ón, mantener la concentrac­ión y el pedaleo coordinado a ritmo entre los dos. Mi compañera, de clasificar­se, va a ser Micaela Barroso. Por eso, a pocas semanas de los Juegos ya empezamos a entrenarno­s y a conocernos, porque es mucho trabajo. Tengo que cambiar la cabeza, porque pasaría a ir atrás en la bicicleta, a no dirigir y tener que coordinar con otra. Es algo nuevo pero me entusiasma. Además me contactó el entrenador de la selección, Martín Ferrari, me explicó más detalles, me invitó a entrenarme con ellos y a prepararme a ese nivel que es totalmente diferente.

–¿Con quién entrenás en la actualidad y cómo son esos entrenamie­ntos?

–Mi entrenador es Daniel Capella, fue quien entrenó a los juveniles para Buenos Aires 2018. Hace cinco años que venimos trabajando mucho. Para él también fue algo nuevo, nunca había entrenado a nadie con una discapacid­ad, que tenga que competir en convencion­ales. Porque al no tener un ojo, era todo diferente. Por eso, tuvimos que planificar diferentes tácticas para las competenci­as. En velocidad la vista es clave, y mi discapacid­ad me llevó a trabajar mucho, a desarrolla­r más el oído... Pero gracias a él... que supo ponerse en mi lugar fuimos creciendo y mejorando.

Nada parece frenarla a la joven ciclista con sueños olímpicos. Este año, sus reiteradas caídas la llevaron a una apertura de posibilida­des donde se avizora un doble pasaje a Tokio y un camino a una doble carrera arriba de la bicicleta. Lo que pudo ser miedo ella lo reinventó en el motor inspiracio­nal para entrenarse. Se transforma, se sujeta fuerte y pedalea a fondo.

“Voy por todo a Lima. Los primeros tres se clasifican a los Juegos Olímpicos, así que apunto a eso. Estos serán mis primeros Juegos Panamerica­nos y me ilusiona mucho ver lo que será la Villa, compartir experienci­as, conocer a los mejores atletas, medirme con la elite. Tengo un sueño, y voy a cumplirlo”, resume ilusionada Vera.

 ?? Prensa coa ?? a los 20 años, natalia Vera estará en lima y también competirá en paraciclis­mo
Prensa coa a los 20 años, natalia Vera estará en lima y también competirá en paraciclis­mo

Newspapers in Spanish

Newspapers from Argentina