Investigan una muerte
Magdalena Leguizamón falleció anteanoche; hasta ahora dos médicos están imputados por el delito de lesiones culposas
La mujer a la que le habían amputado una pierna por error falleció debido a un paro cardíaco.
Anteayer, a las 22.30, murió Magdalena Leguizamón, la mujer de 66 años a la que le habían amputado la pierna equivocada en un sanatorio de Berazategui, donde había estado internada el mes pasado por lesiones en los pies asociadas con la diabetes.
Luego de la autopsia, que servirá para que peritos determinen si la amputación tuvo o no que ver con el deceso, la Justicia dispuso la entrega del cuerpo a la familia.
El estado de salud de Leguizamón se deterioró estos últimos días en la clínica CENI, de Quilmes, adonde la trasladaron tras el error quirúrgico por el que se les imputó el delito de lesiones culposas a un cirujano y un traumatólogo del Nuevo Sanatorio Berazategui. Y por ahora, ese continuará siendo el delito investigado, según la fiscal Karina Santolín, a cargo de la UFI Nº 7 de Berazategui.
“Hasta que no se expida un médico sobre si la muerte tuvo una relación causal con la amputación y que en ese procedimiento hubo mala praxis, la carátula de la causa seguirá siendo la misma –dijo a la nacion–. Si se comprueba causalidad, entonces cambiaría la situación procesal de los imputados”.
Anteayer, los médicos de la clínica de Quilmes lograron convencer a la familia de Leguizamón de la necesidad de trasladar a la paciente a un centro de mayor complejidad. Así se decidió en consulta con PAMI, la obra social que tenía la mujer, su derivación al Sanatorio Güemes, en la ciudad de Buenos Aires, que es donde reciben atención los pacientes más complejos de la obra social.
A las 22.30, Leguizamón sufrió un paro cardíaco tras una descompensación que fue fatal.
El seguimiento médico diario en la clínica CENI, según se pudo reconstruir, fue registrando un deterioro de su estado de salud general asociado con la combinación de hipertensión, diabetes, insuficiencia renal avanzada, además de las lesiones en las extremidades inferiores por las que inicialmente en la clínica de Berazategui le habían amputado un dedo del pie antes de avanzar a la amputación de la pierna a la altura de la rodilla, que luego terminó con la intervención en la pierna equivocada. “Se encontraba estable para el traslado, pero cuando llegó tuvo un paro cardíaco y falleció”, pudo saber la nacion.
El lunes 22 pasado, Leguizamón ingresó al quirófano del sanatorio, donde había estado internada desde hacía una semana por lesiones en los pies que personal de la clínica CENI había observado durante una sesión de hemodiálisis. Cuando consultó en el sanatorio asignado por su obra social, quedó internada.
El cirujano cardiovascular Rafael Rico le indicó primero la amputación del cuarto dedo del pie derecho por la necrosis (muerte del tejido) asociada con la diabetes. La operó el traumatólogo Gonzalo Cardozo Montecinos. Rico evaluó luego que esa complicación avanzaba e indicó la amputación de la pierna. La intervención se adelantó dos días, según el relato de la familia, y fue cuando Cardozo Montecinos amputó la otra pierna. Tras la denuncia que presentaron las hijas en sede policial y ante el PAMI local, fue cuando se dispuso el traslado de la paciente a la clínica de Quilmes.
También avanza la investigación administrativa que inició la obra social. PAMI informó que ya le retiró al sanatorio 5000 de los 25.000 afiliados asignados para su atención. Los derivó a prestadores cercanos, mientras un auditor médico monitorea la atención y los procedimientos que reciben el resto de los afiliados. Según explicaron fuentes de la obra social, no se siguieron derivando más pacientes a otros prestadores por la falta de centros en la zona con ciertos requisitos de seguridad en la atención.
También hay otras obras sociales que, tras la denuncia de la familia de Leguizamón, comenzaron a retirarle pacientes al sanatorio.