Boca y el gol
El delantero Franco Soldano llega al conjunto xeneize luego de la transferencia de Darío Benedetto al fútbol francés
Apenas cinco días se demoró Boca en reemplazar a Darío Benedetto. El goleador se subió el sábado al avión rumbo a Marsella, donde ya fue presentado a través de las redes sociales como nuevo refuerzo del Olympique, y ayer Gustavo Alfaro se enteró de que tendrá a un nuevo Nº 9 a su disposición: Franco Soldano. La inminente incorporación se sumará a Ramón Ábila y al venezolan Jan Hurtado como alternativa para una posición en la que Boca había quedado debilitado tras la partida de Pipa al fútbol francés.
No fue la primera búsqueda. Tras el fenómeno que se generó alrededor de la llegada de Daniele De Rossi, Boca buscó a otro europeo para ocupar el puesto de centrodelantero: el galo André-Pierre Gignac, en Tigres de México, fue una opción que se sostuvo durante las últimas dos semanas, aunque la altísima cláusula de rescisión hizo imposible que las negociaciones llegaran a buen puerto. El club xeneize tampoco logró repatriar a Mauro Boselli, quien expresó sus intenciones de continuar en el Corinthians de Brasil. Ni tampoco a Paolo Guerrero, figura del inter e imposibilitado de jugar la actual edición de la Copa Libertadores. Del listado que paseó por radios, programas de TV y redes sociales tampoco arribaron Guido Carrillo, el ecuatoriano Felipe Caicedo ni el chileno Eduardo Vargas. De todos ellos, el único por el que la dirigencia hizo un intento por sumarlo fue el exEstudiantes.
Soldano será finalmente la nueva cara que presentará el equipo de Alfaro para intentar conquistar una Copa Libertadores que le es esquiva desde 2007, En cuartos de final , Boca se cruzará con Liga de Quito, en una llave que, al igual que los octavos de final, definirá en la Bombonera, el 24 de agosto.
El delantero de 24 años regresa al fútbol argentino tras una breve experiencia en el Olympiacos de Grecia. En suelo ateniense no tuvo mucha continuidad: el cordobés marcó solo un gol en los apenas 9 partidos que jugó en el semestre pasado, después de ser comprado por el combinado europeo a cambio de 850.000 euros.
Soldano, que se caracteriza por tener un muy bajo perfil, es un delantero que Alfaro pretendía y al que incluso llamó antes de que se marchara a Grecia. El exUnión llegará para ejercerle mayor presión a Ábila, titular indiscutido tras la partida de Benedetto, quien lo elogió: “No tengo dudas de que Wanchope tiene que ser el Nº 9 de Boca, traigan a quien traigan. La van a tener complicada. Está muy flaco, está muy bien físicamente, y ya me saco la nueve”, dijo en Ezeiza.
El elegido de Gallardo
Franco Soldano hizo su debut en primera división a los 15 años con la camiseta de Unión de Sunchales. En la temporada 2013-2014 marcó 22 goles entre su participación en el Argentino B (19 en 26 partidos) y la Copa Argentina (3 tantos en 6 encuentros). Su talento llamó la atención de Unión de Santa Fe, que se adueñó del proyecto y se convirtió en uno de los pilares del ascenso del Tatengue a la Superliga.
Pretendido en el pasado por Marcelo Gallardo en River para matizar la partida de Lucas Alario, Soldano vestirá la camiseta de Boca. Si bien aún no se afianzó como un gran goleador, es un nueve que tiene buenos movimientos en ataque y sacrificio para colaborar con el equipo a la hora de recuperar el balón. Esta característica ayudaría al renovado equipo de Alfaro, que apuesta a presionar en el campo rival.
Otro de los aspectos por los que se desataca la nueva incorporación de Boca es por su muy buen juego aéreo (mide 1.89m). Apenas un dato que valida esa cualidad: en la Superliga 2017/2018 fue el futbolista que más pelotas cabeceó, con 277, Con un detalle: apenas jugó la primera mitad.
También tiene técnica para manejar la pelota con los dos pies, sabe leer los espacios en ataque y es veloz para su posición de centrodelantero. También le valoran una gran capacidad para aguantar la pelota de espaldas y buscar a un compañero, y puede generar múltiples ventajas para un equipo con un plantel largo, que posee múltiples variantes en ataque. Con su llegada, Boca incorpora a un jugador con características diferentes a las que ya tiene cubiertas con Ábila y Hurtado.
Mientras Alfaro apuesta por él y espera su explosión definitiva como goleador, Soldano llegará a la Bombonera en un contexto similar al que se dio con el arribo del colombiano Sebastián Villa: una apuesta a futuro que estará obligada a rendir desde el primer instante de acción, en un club que debe reemplazar la cuota goleadora que perdió con la salida de Benedetto.
Su desembarco en La Boca será por un año y medio, a cambio de 300 mil dólares y una opción de compra de 5 millones. Y antes del fin de semana podría ser presentado de manera oficial.