Lágrimas en el cierre.
El Presidente compartió un acto en Vicente López con la gobernadora, que les dijo a los votantes que le “sigan sosteniendo la mano”; se hizo viral una campaña de apoyo en redes
Mauricio Macri y María Eugenia Vidal sellaron con un abrazo la campaña electoral para las elecciones primarias del domingo, anoche, en Vicente López. El Presidente se emocionó durante su discurso, en el que reiteró que “no hay que volver al pasado”. Antes, la gobernadora había reclamado: “No me suelten la mano”. En Merlo, a la misma hora, Cristina Kirchner y Axel Kicillof concluyeron la campaña del Frente de Todos en el principal distrito electoral del país. Alberto Fernández, en tanto, hizo un acto final en la ciudad de Córdoba.
Mauricio Macri le habló ayer al electorado que le es más esquivo, el del conurbano, en su último acto político antes de las PASO. El Presidente se emocionó (y lloró) al referirse a la gobernadora María Eugenia Vidal, en un discurso en el que buscó apelar a la emotividad para hacer su último pedido del voto.
“No se pierdan esta oportunidad, no se pierdan a María Eugenia Vidal. ¡No se la pierdan!”, exclamó Macri en un acto en Vicente López, apenas empezó su discurso. La gobernador a también lloró, sentada en la primera fila, cerca de la tarima circular que lleva el oficialismo a sus actos. “Lo que hemos logrado nos tiene que dar esperanza para la segunda etapa. Sobre todo en el conurbano, que es donde ha habido más mentira y más resignación”, dijo el Presidente.
Minutos antes, Vidal se había referido a Macri como “un bonaerense”. Echó mano del lugar de nacimiento del Presidente, Tandil, como un guiño para generar cercanía, a pesar de la identificación que tiene el Presidente con la ciudad por su paso por la jefatura de gobierno porteño.
Macri y Vidal comenzaron a hablar 19.31. Esperaron, monitoreando por WhatsApp, a que finalizara el acto de Axel Kicillof en Merlo para no competir por la pantalla de los canales de noticias. El vicegobernador de la provincia, Daniel Salvador, debió estirar su discurso para esperar a que entrara la gobernadora al gimnasio cubierto del Centro Asturiano.
El oficialismo decidió cerrar su campaña a las PASO en la provincia, el territorio más difícil y más crucial, no solo por su peso electoral (el 37% del padrón), sino también por el pesimismo que puede sembrar una derrota de Vidal en octubre si Macri consigue ir al ballottage. En La Plata, aún ayer admitían que se ven “corriendo de atrás” en las PASO.
Aunque le habló al conurbano, Macri hizo su último pedido del voto antes de las primarias en uno de los terruños bonaerenses donde Juntos por el Cambio tuvo mejor performance electoral, Vicente López.
El acto tuvo lugar en el Centro Asturiano, el mismo lugar donde Vidal cerró en la campaña de 2015 y en las legislativas de 2017. Esta vez, al cierre de la provincia se sumó Macri.
El Presidente le dedicó la primera parte de su discurso a lanzar loas a la gobernadora. “Los bonaerenses fueron los más audaces de 2015 porque apostaron por lo mejor que les pasó en los últimos 30 años, que es María Eugenia Vidal”, dijo, y subrayó que tiene por la mandataria “respeto y cariño”. “Tal vez esté más sensible porque es el día del gato”, bromeó Macri. El equipo de Juntos por el Cambio ayer utilizó el apodo del Presidente para hacer una campaña con la figura del “gato”.
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También lanzaron una campaña viral con el hashtag (la etiqueta) #YoLoVoto con la consigna de subir a las redes una foto de apoyo con el primer plano de Macri. El Presidente destacó luego, a través de un tuit, que el hashtag se había convertido en “tendencia global #1 en Twitter”.
Macri aludió elípticamente a la sensible lectura que harán los mercados de las PASO. “Este domingo es muy importante porque la incertidumbre nos hace daño. Cuanto antes lo hagamos, antes lo vamos a lograr”, dijo, al reforzar su discurso sobre la importancia de participar en las PASO para cosechar el voto más apático. “Siempre tenemos que acordarnos de dónde partimos. La provincia era un perfecto ejemplo del abandono. Por desinterés y producto de las mafias y la corrupción”, dijo Macri. Vidal, por su parte, reiteró el mensaje de “lucha contra las mafias” que viene repitiendo en los actos políticos y en el raid mediático que encaró en la última semana. “Yo no estoy acá por un cargo ni vine a hacerme rica. Claro que falta, pero ahora no podemos bajar los brazos porque nos merecemos más”, dijo la gobernadora. Como Macri, buscó exhibir sensibilidad. “Mi corazón está en los 17 millones de bonaerenses. Por eso les tengo que pedir, mirándolos a los ojos, que ahora me sigan sosteniendo la mano”, reclamó.
Con un duro discurso la precedió el ministro de Seguridad y primer candidato a diputado, Cristian Ritondo, que dijo que el kirchnerismo “no dio la pelea” contra el narcotráfico. “Ellos fueron parte del problema de la droga en la provincia de Buenos Aires”, lanzó. El intendente de Vicente López, y primo del Presidente, Jorge Macri, también aludió en duros términos al kirchnerismo. “Ahora de golpe de nuevo son todos amigos, son moderados y educados; muchachos, los conocemos”, dijo. Macri buscó en los últimos días apuntalar a su boleta en los partidos de la zona norte del Gran Buenos Aires. Gracias a partidos como Vicente López y San Isidro, Macri podría arrimarse a Alberto Fernández en la primera sección electoral. Según estiman en la Casa Rosada, el Presidente tendrá su cosecha más magra en la tercera sección electoral del conurbano y sacará la mayor diferencia en el interior de la provincia de Buenos Aires.