Las definiciones que generan temor en el mercado

Más allá de que está fuertemente asociado a la figura de la expresidenta Cristina Kirchner, las declaraciones que hizo el candidato de Frente de Todos, Alberto Fernández, sobre los principales temas de la agenda económica no cooperaron para que su victoria fuera bien recibida por el mundo financiero.

“Vamos a dejar de pagar los intereses de las Leliq [letras de liquidez del Banco Central] que la Argentina está pagando todos los días”, anunció en julio, durante una entrevista con Roberto Navarro. Así explicó cómo haría para financiar el aumento del 20% que prometió para las jubilaciones. Luego, aclaró que nunca dijo que pensaba en “defaultear” los intereses por las letras ya emitidas, sino que consideraba que eran excesivas las tasas. Sostuvo que hay que modificar la lógica de la economía argentina, “darla vuelta y cambiar de ese esquema especulativo a un esquema productivo”.

“El que apuesta a las Leliq gana mucha plata y el que tiene que invertir no tiene crédito y no puede hacerlo, por lo que las empresas cierran”, apuntó.

Sobre el dólar, Fernández dijo cuando valía $43,7: “Nos hacen vivir con un dólar barato, que se fuga permanentemente de la Argentina, y a cambio pagamos tasas exorbitantes que impiden el desarrollo argentino”. Sin embargo, evitó pronunciarse sobre el valor que debería tener el dólar. Si bien prometió que no volverán las restricciones a la compra de moneda extranjera, sostuvo que “la solución que propuso Macri al problema de la falta de dólares fue mucho peor que el cepo”.

Respecto de las tarifas, Fernández anticipó que procedería a pesificarlas, y en referencia a la relación con el FMI, anunció que buscaría renegociar el acuerdo.