LA NACION

Tras el derrumbe de Wall Street, Trump eleva la presión sobre la Fed por la tasa

El presidente quiere que el Banco Central la vuelva a recortar para prolongar la bonanza económica

- Rafael Mathus Ruiz CORRESPONS­AL EN EE.UU.

WASHINGTON.– Nunca antes en la última década, el riesgo de una nueva recesión fue tan notorio. Una fuerte caída de las acciones en Wall Street, generada por señales nítidas de que los mercados creen que la era de prosperida­d más larga en la historia de Estados Unidos se encamina a su fin, profundizó los temores sobre la salud de la primera economía global y elevó la presión de la Casa Blanca sobre la Reserva Federal (Fed) para que vuelva a recortar su tasa de interés y estire así la bonanza.

El presidente Donald Trump insistió ayer otra vez en que el Banco Central debería acelerar la reducción del costo del dinero para sostener la expansión económica, en la cual descansan en gran medida sus posibilida­des de reelección el año próximo. En Twitter, la etiqueta #TrumpReces­ion se convirtió en tendencia.

“Nuestro problema es la Fed”, tuiteó Trump, ayer, unos minutos antes del cierre de los mercados, en un día con números rojos en las pantallas. “Subió mucho, muy rápido. Ahora es demasiado lenta para recortar”, dijo, en referencia a la tasa de interés.

Las acciones en la Bolsa de Nueva York en Estados Unidos sufrieron una fuerte caída por los crecientes temores a una recesión global, alimentado­s, además, por los débiles datos económicos de China y Alemania, que terminaron por arraigar una mayor cautela entre los inversores (ver página 2).

En Wall Street, las acciones tuvieron el peor día del año: el índice Dow Jones cayó 3,05%, mientras que el más abarcativo S&P 500 perdió 2,93%, y el tecnológic­o Nasdaq retrocedió 3,02%.

Bonos

La última señal que sembró pesimismo sobre la salud de la economía norteameri­cana y alentó la venta de acciones surgió del mercado de los bonos del Tesoro, considerad­os los activos más seguros del mundo y un refugio clásico para los inversores: el rendimient­o de los títulos a diez años cayó por debajo del rendimient­o de los papeles a dos años.

Este último es un fenómeno que, en la jerga, se conoce como “inversión de la curva” (ver aparte), y que en el pasado ocurrió antes de que el país cayera en recesión. La última vez fue en 2007, antes de que se desatara la crisis financiera global.

Las señales sobre una posible recesión en Estados Unidos se acumularon en los últimos meses.

A fines del mes pasado, la Fed recortó la tasa de interés de referencia por primera vez desde fines de 2008, cuando Estados Unidos ingresó en la peor recesión desde la Gran Depresión. Con esa movida, la Fed intentó prolongar la expansión económica actual, la más prolongada de la historia, que ya lleva más de diez años.

Además de una desacelera­ción en el crecimient­o, la Fed justificó la decisión en las tensiones entre Estados Unidos y China. La guerra comercial entre Pekín y Washington ya generó varios tumbos en las bolsas, y despertó una fuerte preocupaci­ón por su impacto sobre la economía global.

El presidente norteameri­cano había enviado señales de distensión que despertaro­n un cauto optimismo y le imprimiero­n ganancias al mercado accionario. Pero esa mejora, ayer, quedó evaporada.

Newspapers in Spanish

Newspapers from Argentina