En Paraná, el Presidente pidió “acompañar a los abuelos a votar”
Se diferenció de Fernández al afirmar que no le diría desde un atril a la sociedad “lo que tiene que pensar”
PARANÁ.– Con el debate presidencial fresco en la memoria, Mauricio Macri aseguró ayer en Paraná que “no le dice” a la sociedad desde “ningún atril” lo que tiene que “pensar”, sino que los “deja vivir con libertad”. No fue la única alusión al cruce que mantuvo anteanoche con su rival del Frente de Todos, Alberto Fernández: el Presidente afirmó que “los abuelos tienen celulares” y pidió a la militancia que los “acompañen a las escuelas a votar”.
Con un afónico recibimiento del candidato a senador Alfredo De Angeli, que hizo de locutor, Macri hizo pie en la capital entrerriana con una nueva marcha del “Sí se puede”, que para el oficialismo reunió a unas 15.000 personas. “Los miro y estoy viendo el corazón de la Argentina, ustedes me van a cuidar la espalda. Los miro y veo la fuerza de este país, el verdadero poder de la Argentina. Ustedes me inspiran, me dan fuerza y les agradezco ese 24 de agosto cuando me dijeron que no estaban solos y ahora yo les digo que ustedes no están solos”, dijo Macri arriba del escenario montado en el Monumento Justo José de Urquiza, una de las panorámicas de la ciudad, con el río Paraná de fondo.
“Miren todos los que somos y cada día somos más los que no nos resignamos y creemos en lo que estamos haciendo, nos une querer cuidar nuestra democracia, querer vivir en paz, nuestra honestidad, nunca bajar los brazos y nos une el no a la impunidad”, interpeló el Presidente al público, que se conformaba de militantes que llegaron de distintos puntos de la provincia.
Macri no se corrió un ápice de la narrativa proselitista que viene
desarrollando en la campaña del “Sí se puede”, que tiene como hoja de ruta recorrer 30 ciudades en 30 días.
“Les quiero decir que no tengamos miedo porque siempre los voy a defender, este es nuestro país y hace cuatro años decidimos jugarnos por el cambio. Tenemos que estar orgullosos de todas las cosas que hemos logrado cambiar, que son muchas. Pero también tenemos que reconocer que nos faltan muchas más y soy el primero en saber que no son tiempos fáciles”, reconoció, fiel al guion post-PASO.
En otro tramo de su discurso, el Presidente afirmó que la elección del 27 de octubre se puede “dar vuelta”. Entonces fue cuando apuntó a la participación en las urnas y la fiscalización, dos conceptos que el oficialismo iguala para explicar la derrota de las primarias.
“Tenemos que lograr que esta votación sea histórica. Tenemos que ir todos a votar por el país, y llevar a nuestros abuelos, acompañarlos a las escuelas, acompañar a todos a cambiar la historia para siempre. También tenemos que hacer valer nuestro voto, y por eso tenemos que fiscalizar”, suplicó. Los presentes reaccionaron con un “sí se puede”.
En esa línea, Macri afirmó: “Nuestros abuelos tienen celulares, corazón y fuerza: todo eso tienen”. Fue una respuesta a Fernández, que durante el debate le dijo que los jubilados no podían pagar la factura del celular, luego de que el Presidente destacara el uso de los teléfonos móviles en salud.
Macri también hizo un mea culpa ante la clase media. “La carga es mucha, especialmente desde abril del año pasado, cuando se combinaron la sequía y la pérdida de crédito para la región”, dijo a los militantes.
En las horas previas a la visita, el titular del Sistema Federal de Medios Públicos, Hernán Lombardi, fue otra vez, en Entre Ríos, el coordinador del desembarco presidencial. “Tiene un gran respeto por Entre Ríos y queríamos que Paraná estuviera presente”, dijo el funcionario. Y especuló con que las presencias llegaban a 15.000 personas.
Desde temprano habían comenzado las tareas para ultimar los detalles organizativos y de seguridad. En la zona hubo despliegue de un centenar de efectivos de Gendarmería, a los que se sumaron uniformados de la Policía Federal, Prefectura, Seguridad Aeroportuaria y la Policía de Entre Ríos.
La jornada se vigiló mediante drones y personal de Inteligencia supervisó la zona con tres días de anterioridad.
La ciudad se vio, desde temprano, con cortes de tránsito en las inmediaciones del lugar donde se montó el escenario.