Polémica por el cambio de rango del Archivo Histórico de Buenos Aires
gestión. Por decreto, el organismo que atesora tres millones de documentos, como manuscritos del Martín Fierro, pierde su estatus de dirección
LA PLATA.– Antes de dejar su cargo, la gobernadora de la provincia de Buenos Aires, María Eugenia Vidal, suprimió por decreto catorce direcciones vinculadas al área de cultura. Por caso, la dirección del Archivo Histórico Provincial Ricardo Levene, la del Museo Histórico Provincial, varias de la estructura del Teatro Argentino y la de Promoción de Derechos Culturales. Mientras la oposición afirma que se trata de un fuerte golpe a la cultura y a la historia de esta provincia, ya que quita jerarquía a estas dependencias, el gobierno saliente sostiene que solo se trata de un acto de reorganización administrativa.
El Ricardo Levene es el segundo archivo más grande del país. Cuenta con tres millones de documentos, de valor singular. Conserva desde las actas del Congreso Constituyente de 1817-1819 hasta los documentos del primer empréstito internacional, tomado en 1823. Guarda también fuertes referencias de la cultura local, por ejemplo, manuscritos originales de La Vuelta de Martín Fierro, de José Hernández, hasta la causa por el asesinato de Facundo Quiroga.
“El archivo no se cierra, ni desaparece, seguirá funcionando en el mismo lugar”, dijo a la nacion Guillermo Ruiz, su actual coordinador. La diferencia sustancial radica en que ya no es una dirección provincial, por tanto pierde jerarquía y autonomía, dado que ahora depende de la dirección provincial de Museos y Preservación Patrimonial.
“Hace dos años teníamos esta situación en los hechos. Y nada cambió –asegura Ruiz–. Pudimos continuar con todos nuestros objetivos, aseguró el titular del Archivo, que funciona en el histórico Pasaje Dardo Rocha de esta capital. Claro que Ruiz –profesor de Historia y licenciado en Comunicación Social– es funcionario político designado por el gobierno de Vidal.
La Asociación Civil Archivistas de la Función Pública Argentina es mucho más crítica. Expresó su “profunda preocupación” por la decisión del gobierno de la provincia de Buenos Aires de suprimir mediante el decreto 1345/19 la dirección del Archivo Histórico Provincial Ricardo Levene de la estructura orgánica funcional del Ministerio de Gestión Cultural de la provincia. “Esta medida constituye un golpe muy serio para uno de los archivos más importantes del país, que pierde su estatus, capacidad operativa y manejo presupuestario para gestionar el patrimonio documental histórico de la provincia”, se dijo desde esa asociación. Y advirtieron: “Se trata de un retroceso alarmante en la ya endeble política estatal hacia los archivos, que contradice una vez más las demandas de políticas públicas de calidad para la protección del patrimonio documental y el acceso a la información, que son las propias de una sociedad democrática”.
La Facultad de Humanidades y Ciencias de la Educación de la Universidad Nacional de La Plata pidió que se deje sin efecto el decreto en cuestión. La Asociación Argentina de Historia Económica y la Asociación Argentina de Investigadores en Historia apoyaron esa solicitud dado el acervo, “que incluye documentos desde el siglo XVI hasta el XX, divididos en fondos de gran valor, como los de la Real Audiencia de Buenos Aires; Sala de Representantes; Cámara de Diputados y Cámara de Senadores de la provincia; Juzgado del Crimen; Ministerio de Obras Públicas; Dirección General de Escuelas; Ministerio de Gobierno: Escribanía Mayor de Gobierno; Contaduría; Banco Hipotecario, así como una nutrida colección de mapas y fotografías, archivo oral y diarios provinciales, además de una gran biblioteca de historia local y regional”.
El diputado provincial Guillermo Escudero (Frente de Todos) realizó una presentación para que se suspenda el decreto 1345/19. En igual sentido se expresó el presidente de la Comisión de Cultura en la Cámara baja, Javier Faroni (Frente de Todos), quien rechazó y dijo estar “preocupado” por la medida de la gobernadora. El ministro de Cultura, Alejandro “Conejo” Gómez no respondió la llamada de la nacion. “Esto no es nuevo”, dijeron en su entorno. Es cierto: el decreto se firmó el 17 de octubre y se publicó el 22 del mismo mes. Cinco días antes de los comicios generales. Un momento oportuno ya que las miradas críticas estaban orientadas a los resultados electorales.