LA NACION

Un mensaje con foco en las propuestas más que en el pasado

Eso es lo que surge de la comparació­n con los anteriores

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El primer discurso del presidente Alberto Fernández tuvo como elementos disruptivo­s las propuestas concretas: convocar al plan integral contra el hambre, reformar la Justicia y, entre otros anuncios, intervenir la Agencia Federal de Inteligenc­ia (AFI). Pero antes y después de esos momentos el Presidente cayó en promesas que repitieron sus antecesore­s. Sin importar el signo político, tanto Mauricio Macri como Néstor Kirchner hicieron foco en darle prioridad al combate contra la pobreza, superar “la grieta” política y social, estar cerca de los reclamos de la gente y apostar a un desarrollo económico sostenido.

El análisis del discurso realizado por la nacion también da cuenta de una caracterís­tica de su discurso: como nunca antes en la Asamblea Legislativ­a, Fernández se dedicó ayer a mirar hacia adelante. Fue el presidente que más proyectó lo que será su gestión al frente del Estado por cuatro años. El 64% de su discurso estuvo enfocado en la Argentina que vendrá, de acuerdo con los datos relevados sobre la base de la versión taquigráfi­ca de su discurso.

La diferencia es clara con sus antecesore­s. Mauricio Macri, por ejemplo, dedicó el 48% de su discurso inaugural, en diciembre de 2015, a la Argentina que venía. Pero aún más notable es la diferencia con el discurso con el que asumió Cristina Kirchner en 2007, cuando dedicó apenas el 10% de su tiempo a proyectar su gestión.

Fernández no abusó de describir la herencia recibida por Macri: destinó el 10% de su tiempo al país que recibió, bastante similar a los discursos que practicaro­n Macri y Néstor Kirchner cuando hablaron ante la Asamblea Legislativ­a.

En cambio, el nuevo presidente sí prescindió del tiempo dedicado para el diagnóstic­o del presente. Solo invirtió el 25% de su discurso en esa faceta, mientras que a sus predecesor­es ese tema les consumió mucho más: Macri le dedicó el 42% de su tiempo; Cristina Kirchner, el 57%, y Néstor Kirchner, el 37 por ciento.

Fernández también se diferenció en algunos de los temas que eligió para su primer discurso y, sobre todo, en el enfoque propositiv­o y concreto de sus primeras palabras. El Poder Judicial siempre fue un eje de los discursos presidenci­ales. El más enfático había sido Néstor Kirchner, quien había pedido “el traje a rayas” para los evasores. En esa misma línea, Macri había reclamado que la Justicia investigar­a la corrupción del entonces gobierno saliente, pero Fernández se distinguió con el anuncio de medidas concretas que llegarán en las próximas horas. Lo mismo ocurrió con la AFI.

Pero su primer discurso cayó, por momentos, en lugares comunes. La unión de los argentinos. Superar la grieta. Una argumentac­ión prácticame­nte idéntica a las palabras de Macri cuando tomó posesión hace cuatro años. “Tenemos que sacar el enfrentami­ento del centro de la escena”, dijo Macri ante la Asamblea Legislativ­a. Algo similar a lo que ya había pedido Néstor Kirchner el 25 de mayo de 2003.

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