El FMI volvió a apoyar al Gobierno y pidió colaboración a los tenedores de títulos argentinos
Su directora abogó por un entendimiento “racional y mutuamente respetuoso”
En un renovado apoyo del Fondo Monetario Internacional (FMI) al Gobierno en el marco del proceso de reestructuración de la deuda bajo legislación extranjera, la directora gerente del organismo, Kristalina Georgieva, reclamó ayer colaboración a los acreedores privados.
La economista búlgara renovó su pedido en el marco de una reunión virtual entre miembros del G-20 y el Club de París, de la que participó además el ministro de Economía, Martín Guzmán. El reclamo de la directora gerente del Fondo fue realizado luego de que el Gobierno mejorara esta semana su oferta inicial a los bonistas con títulos bajo legislación Nueva York.
“Los acreedores privados tienen que ver este como un momento de acción, ver cómo los acreedores y el país pueden unirse”, dijo la directora luego de una reflexión en el mismo sentido realizada por el ministro de Finanzas de Arabia Saudita, Mohamed Al Jadaam. “Y eso es lo que tenemos que buscar: la colaboración entre acreedores y deudores de una manera racional y mutuamente respetuosa. El Banco Mundial y nosotros haremos nuestra parte por la transparencia de la deuda y por una prudente reestructuración”, agregó.
Esta semana, el ministro de Economía enmendó ante la Comisión de Bolsa y Valores de los EE.UU. (SEC, por sus siglas en inglés) la oferta original que había realizado a bonistas con títulos elegibles hasta US$65.000 millones. La propuesta de Guzmán –la cuarta– implica una fuerte suba del valor presente neto (VPN) a tasa de descuento de 10% (llega a 53 centavos por dólar), respeta los indentures (prospectos originales) de 2005 y 2016, establece un piso mínimo de participación del 50% y reconoce intereses caídos.
“El G-20 ha acordado una iniciativa holística, que propone una suspensión del pago de obligaciones de deuda y una posible extensión de los vencimientos a la segunda mitad de este año, teniendo en cuenta los análisis del Fondo Monetario Internacional y el Banco Mundial, y las necesidades de liquidez de aquellos países elegibles”, había dicho Al Jadaam.
“En algunos países, existe la necesidad de un proceso de reestructuración ordenado y sostenible de la deuda soberana, con la participación de acreedores del sector privado. Un ejemplo de esto es el caso de la Argentina, por el cual alentamos a los tenedores privados de la deuda a considerar la iniciativa de la Argentina de una manera positiva”, había rescatado.
Guzmán recibió ayer el rechazo a la oferta de los dos comités de acreedores más duros en la negociación (AdHocyExchange),comopreveían en el Ministerio de Economía.
“Los efectos de la pandemia son diferentes y asimétricos dependiendo del tipo de economía. Podemos identificar tres tipos de efectos: primero los que enfrentan las economías avanzadas; segundo, los que enfrentamos las economías de ingreso medio, y en este sentido tenemos el caso especial de la Argentina,
y me uno tanto a Mohammed como a Kristalina, deseando un rápido y sensato acuerdo entre la Argentina y sus acreedores”, dijo Arturo Herrera Gutiérrez, ministro de Economía de México, cuyo gobierno tiene buen vínculo con Alberto Fernández.
“Si hay un país que conoce lo nocivos que son los descalces de moneda es la Argentina”, dijo Guzmán en ese encuentro virtual, que recalcó la buena performance que está logrando el Gobierno con relación a la deuda en pesos. “De hecho, ahora estamos haciendo nuestros máximos esfuerzos para reestructurar la deuda en moneda extranjera luego de un sendero de endeudamiento a partir de 2016 que terminó mal”, indicó el ministro.
“Hemos hecho una propuesta que muestra un importante esfuerzo del lado de la Argentina y un gran compromiso con llegar a un acuerdo con nuestros acreedores”, dijo Guzmán.
“La Argentina está llevando a cabo una reestructuración de su deuda pública, y si hay algo que tenemos que tener en cuenta es que este no es un buen momento para deshacer el progreso que ha sido alcanzado en los últimos años en la comunidad internacional en el lenguaje de los contratos de deuda soberana”, explicó el funcionario.
“En 2014, la asociación internacional de mercados de capitales, con el apoyo del FMI y del G-20, respaldó mejoras en las cláusulas de acción colectivas. Nosotros estamos trabajando dentro de los marcos internacionales”, afirmó.