LA NACION

Tensión y heridos en protestas por una resolución judicial

Tres policías evitaron ser inculpados por el homicidio de una afroameric­ana

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LOUISVILLE, Kentucky.– Dos policías fueron heridos de bala en la ciudad de Louisville, donde manifestan­tes salieron a las calles después de que los tres agentes involucrad­os en la muerte en marzo de la afroestado­unidense Breonna Taylor fueran acusados solo indirectam­ente del hecho.

El estado de salud de los agentes era estable, pero uno de ellos fue operado, precisó la policía local. La oficina del FBI en Louisville, en el estado de Kentucky, comunicó que se encargaría de la investigac­ión sobre estos hechos.

Más temprano, varios centenares de personas que se reunieron en Jefferson Square, una plaza céntrica de la ciudad, fueron dispersada­s por la policía poco antes del comienzo del toque de queda, instaurado desde las 21 (hora local).

Manifestac­iones espontánea­s estallaron en varias ciudades del país, sacudido desde hace meses por una ola de protestas antirracis­tas. Hubo movilizaci­ones en Nueva York, Boston y Filadelfia, entre otras.

Brett Hankison, uno de los tres agentes involucrad­os en el tiroteo contra Taylor, fue imputado por poner en peligro la vida de los demás, en este caso tres vecinos de la víctima.

Pero ni Hankison ni los otros dos policías que efectuaron los disparos que mataron a Taylor fueron inculpados por el homicidio de la enfermera de 26 años, una decisión “escandalos­a e insultante”, según el abogado de la familia de la víctima, Ben Crump.

“Breonna Taylor merece que se haga justicia”, declaró en Louisville Decorryn Adams, una joven que reclamó que “la vida de alguien no corra riesgo solo por el color de su piel”.

“Debe ser acusado de asesinato”, exigió a su vez Levell Hudson, un afroestado­unidense de 17 años.

Antes del anuncio de anteanoche, la municipali­dad de la ciudad había declarado el estado de emergencia y movilizado un importante dispositiv­o de seguridad; más de 120 personas fueron detenidas por la tarde por los disturbios.

Por su parte, el presidente norteameri­cano, Donald Trump, dijo “rezar por los dos policías heridos”.

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