Pese a una demanda en baja, prevén más aumentos en la carne
Entre agosto y septiembre subió más de 5%; trasladarían al mostrador mayores costos
Después de que la carne vacuna aumentó en promedio un 2,3% en agosto y un 2,8% en septiembre, según datos del Instituto de Promoción de la Carne Vacuna Argentina (Ipcva), los carniceros adelantaron que en los próximos días podrían volver a subir los precios, aunque sin precisar cuánto, porque recibieron con incrementos la media res desde sus proveedores.
La semana pasada, según dijeron en la Asociación de Propietarios de Carnicerías de la Capital Federal, la media res tuvo un aumento de $7, que en los próximos días será trasladado de manera proporcional al precio que paga el consumidor. Pese a que los carniceros dicen que han observado una caída en la demanda de los distintos cortes de carne en los últimos meses, el precio siguió aumentando.
“El carnicero va a tener que sacar un porcentaje promedio para algunos cortes y analizar cuáles tiene que subir”, dijo Alberto Williams, presidente de la asociación que agrupa a los carniceros de la Capital Federal. A su vez, amplió: “La carne ya está muy cara. Si no logran sentarse todos en una mesa y tratan de solucionarlo –porque tiene que haber una regulación de los precios– esto va a hundir a muchos de la cadena carnicera”.
“Tienen que sentarse a hablar porque nuestra actividad está en riesgo y no sabemos si es porque subió la hacienda”, apuntó. El aumento en los mostradores, expresó, se aplicaría durante los próximos días.
“No hay venta de carne, se va a venir abajo la cadena y tenemos miedo de que siga peor. Nosotros dependemos de esto y cada vez hay menos poder adquisitivo”, se quejó.
“La caída en algunos lugares es importante, a pesar de que mucha gente sale a buscar carne más barata”, añadió.
En esa línea, Miguel Schiariti, presidente de la Cámara de la Industria y el Comercio de Carnes y Derivados de la República Argentina (Ciccra), dijo que en las últimas dos semanas los precios subieron en medio de una menor oferta y el traslado de mayores costos para producir, como en el caso de los feedlots (engorde a corral).
“En el caso del maíz, el aumento ha sido provocado por el tipo de cambio, los feedloteros tienen menos hacienda y los terneros subieron de precio de marzo a la fecha. Esto hace que la oferta esté restringida porque no hay animales necesarios destinados al mercado interno”, añadió.
El consumo de carne vacuna por habitante se ubicó en 50,5 kilos por año en septiembre pasado, un descenso de 2,7% (-1,4 kilos/habitante/ año) versus igual mes de 2019.
Por su parte, Leonardo Rafael, presidente de la Cámara Argentina de Matarifes y Abastecedores (Camya), afirmó: “El consumo de estos productos en las carnicerías ha bajado por el tema económico. Estamos esperando una suba en el consumo, y cuando falte, ahí es cuando va a subir el precio”.
“Necesitamos convalidar precios mayores, se están perdiendo 5000 pesos por animal y al no tener demanda no se pueden subir los precios”, apuntó. No obstante, destacó que los nuevos precios “se van a trasladar al mostrador”.
En este contexto, el consultor Víctor Tonelli indicó: “No hay demanda, está totalmente diferida. Tanto de pollos, cerdos y vacunos, los abastecedores no tienen demanda. Tampoco hay un problema de oferta, sino de demanda de carnes por la crisis económica. Esto nunca había pasado antes, que no haya capacidad de consumo”.