Nueva etapa en la ciudad con salas de 5, piletas al aire libre, gimnasios y museos
Tienen luz verde del gobierno porteño desde hoy; además, los locales gastronómicos pueden atender en el interior; en todos los casos, deben respetar protocolos de prevención
Una nueva etapa se inicia esta semana en la Capital con la habilitación de nuevas actividades y más concesiones a ciertos rubros en el contexto de la pandemia. El gobierno porteño prevé su implementación para las próximas horas, aunque resta la autorización de la Nación a los protocolos. Las escuelas comenzarán a recibir a niños de sala de cinco, las universidades e institutos terciarios se reabrirán para algunos talleres y actividades, se permitirá que bares y restaurantes alojen comensales dentro de los locales, y subirán sus persianas los museos, los gimnasios y los estudios de danza.
En el caso de los estudiantes del último año del nivel inicial, reabrirán las salas con grupos de hasta 10 personas y privilegiando actividades al aire libre. Este regreso alcanzará tanto a las instituciones públicas como a las de gestión privada (en ese último caso requieren autorización previa del Ministerio de Educación). Según fuentes consultadas por la nacion, hoy ya volverán a la escuela alumnos de cinco y seis años de algunos establecimientos privados.
Respecto de los institutos terciarios, en las modalidades de educación técnica superior, formación profesional y educación superior de formación docente, también la asistencia estará limitada a 10 presentes. Las universidades también tendrán la posibilidad de reabrir para todas aquellas actividades de investigación y de generación de contenidos en talleres, especialmente para las prácticas necesarias que tengan como objetivo la obtención del título de graduación.
Después de varias reuniones que se desarrollaron a lo largo de las últimas semanas, finalmente los bares y restaurantes podrán atender al público en su espacio cubierto. Como parte de la reapertura escalonada con la que se está trabajando en este sector en particular, por ahora se autoriza una ocupación máxima dentro de los locales del 25% de la capacidad. Los propietarios deberán presentar una declaración jurada ante la Agencia Gubernamental de Control (AGC) que esté firmada por un profesional y que detalle la modalidad de ventilación que posee el inmueble.
“Veremos cómo se aplica el protocolo entre propietarios y clientes y, si funciona, creo que en poco tiempo podremos aumentar el aforo. Son todos aprendizajes”, dijo ayer a la nacion Ariel Amoroso, presidente de la Asociación de Hoteles, Restaurantes, Confiterías y Cafés (Ahrcc). El referente indicó que, según lo establecido, los locales deben contar con ventilación natural cruzada (cuando tienen suficientes ventanas o bien puertas delanteras y traseras) o electromecánica. “No está permitido el uso de ventiladores ni de acondicionadores de aire tipo split”, agregó.
El protocolo para permanecer dentro de bares y restaurantes incluye como condiciones: El servicio es con reserva previa. No está permitido el autoservicio; solo platos a la carta.
Debe haber una distancia mínima entre las mesas de dos metros.
Un máximo de cuatro personas por mesa.
Tiempo máximo de permanencia de una hora y media.
Un reclamo de larga data
Respecto de los gimnasios, asediados por una crisis que dejó como saldo hasta ahora 200 locales cerrados en la ciudad, vuelven a abrir sus puertas con una ocupación máxima del 25% de la asistencia que tenían antes de la pandemia.
No podrán desarrollarse actividades de contacto físico, deben tener una ventilación adecuada dentro del local –en la declaración jurada ante la AGC debe consignarse que no permite recircular el aire dentro del establecimiento– y la asistencia a los establecimientos deberá realizarse mediante un sistema de turnos. La idea es que cada asistente permanezca en el lugar haciendo ejercicio una hora.
Fernando Storchi, fundador de la cadena Megatlón y titular de la Cámara Argentina de Gimnasios, añadió, en diálogo con la nacion, que cada vez que una persona solicite un turno, en la aplicación que ofrezca cada gimnasio, debe completar una declaración jurada sobre su estado de salud.
“Eso nos permitirá tener una trazabilidad y en caso de que alguien se reporte luego como enfermo de coronavirus podremos saber quiénes estuvieron en esa franja horaria para darles aviso”, explicó el empresario. Los centros y estudios de danza funcionarán con un esquema similar al de los gimnasios.
Además de habilitarse las máquinas para muscular, la idea es que dentro de los gimnasios se realicen actividades que impliquen poco desplazamiento, como las clases de yoga o de elongación, por ejemplo. Si bien se pueden realizar ejercicios de alta intensidad, Storchi indicó que, entonces, el protocolo estipula que haya una mayor distancia, de unos seis metros, respecto del resto de los presentes.
El gobierno de la ciudad dispuso también la reapertura de piletas de
natación, por ahora solo al aire libre. Podrá haber una persona cada 15 metros cuadrados. Quienes decidan ir deberán sacar turno previo, no tendrán acceso a los vestuarios y quedarán inscriptos en un registro con su estado de salud. Los natatorios no pueden estar calefaccionados.
Al enterarse de este anuncio, Fernando Puchuri, presidente de la Cámara de Natatorios y Actividades Deportivas de la provincia de Buenos Aires, reclamó a las autoridades bonaerenses que se avance en la provincia con una habilitación similar.
Las piletas (solo aquellas al aire libre) y los gimnasios de los edificios también podrán abrir y deberán funcionar con turnos. El uso de espacios comunes, amenities e instalaciones sigue limitado exclusivamente a propietarios, inquilinos y ocupantes, por lo que queda prohibido el acceso de invitados. Tanto en el ingreso como en el egreso del lugar, los residentes deben utilizar tapabocas. Está permitido que grupos familiares que viven juntos puedan ingresar simultáneamente y se estableció que los turnos, tanto para el uso de la pileta como del gimnasio, deben ser de 45 minutos.
En esta nueva etapa de flexibilización de la cuarentena, la administración de Horacio Rodríguez Larreta les dio el visto bueno a los tratamientos de rehabilitación médica individual en instituciones tanto públicas como privadas.
La nueva etapa que comienza hoy permite las actividades pastorales en espacios abiertos hasta 10 personas. También se habilitarán los casamientos civiles, mediante turnos, y las ceremonias religiosas. Los agasajados podrán convocar a 20 invitados en las instituciones que tengan un patio, junto al máximo de 20 personas dentro del templo.
Cultura
Durante estos siete meses, los museos, como todas las actividades culturales del país, debieron cerrar sus puertas. Así y todo, hubo exposiciones y otras muestras artísticas que llegaron al público mediante recorridos virtuales. Pero, finalmente, otra vez los museos comenzarán a recibir in situ a los visitantes.
La nueva normalidad en los museos implica:
Atención de lunes a domingos (como máximo entre las 10 y las 20).
Visitas con reserva por vía digital y anticipada, no en el lugar.
Circuitos de recorrido en sentido único.
Una persona cada 15 metros cuadrados (para lo cual, el museo deberá controlar la capacidad).
Visita individual (una persona o un grupo de convivientes que no superen las cuatro personas y que, preferiblemente, se deben mantener juntos).
Prohibición de instalaciones artísticas participativas. Tampoco se podrá tocar las obras.
Servicio de gastronomía solo en las terrazas y los patios internos.