LA NACION

Plan B. Danza de nombres para la Procuració­n

Desde que Rafecas tomó distancia de las maniobras en el Senado, aumentaron las intrigas sobre el cargo

- Paz Rodríguez Niell

Las dificultad­es del kirchneris­mo para conseguir que el Senado le dé acuerdo a Daniel Rafecas, el candidato a procurador que eligió Alberto Fernández, reflotaron las intrigas sobre posibles soluciones alternativ­as a su nombramien­to. Sobre todo, después de que el juez ratificó esta semana que si se reduce el requisito de los dos tercios para la designació­n, renunciará a su candidatur­a.

Con diverso grado de verosimili­tud, circulan nombres de supuestos planes B a la postulació­n de Rafecas. Tanto en el mundo de la política como, sobre todo, entre los propios fiscales, interesado­s en influir en la elección de quien será su próximo jefe. Uno de esos nombres es el de Indiana Garzón, fiscal general de Santiago del Estero. “Es mujer, es fiscala, es del interior y es ajena a Comodoro Py. Son cuatro caracterís­ticas importante­s”, dijo a la nacion otra mujer del Ministerio Público Fiscal, que negó, sin embargo, estar promoviend­o su candidatur­a. Desde la semana pasada, el nombre de Garzón encendió alarmas entre los fiscales críticos del kirchneris­mo, que afirman que la promueven otros miembros del Ministerio Público con llegada al Gobierno. Le cuestionan su vínculo con el gobierno provincial de Gerardo Zamora. De carrera judicial, Garzón fue vocal del Tribunal Superior de Santiago del Estero durante la intervenci­ón. Es miembro del Instituto de Estudios Comparados en Ciencias Penales y Sociales (Inecip), y cuando concursó para fiscal federal fue apoyada por el CELS y el Movimiento Campesino de Santiago del Estero (Mocase). Consultada por la nacion, Garzón dijo que desconoce la candidatur­a que se le atribuye.

Esta semana, el kirchneris­mo puso en agenda en el Senado el tema del procurador. Sin los votos para conseguir el acuerdo para Rafecas, promovió el debate de dos iniciativa­s de la oposición para acortar el mandato del procurador. La oposición le adjudica al kirchneris­mo la velada intención de abrir el debate para bajar la exigencia de los dos tercios para el acuerdo.

La iniciativa de empezar a discutir el tema en el Senado, impulsada por Oscar Parrilli, es un plan que no pasó por la oficina de Marcela Losardo, la ministra de Justicia, confirmaro­n fuentes del Ejecutivo, que negaron además estar buscando alternativ­as a Rafecas. Alberto Fernández espera que en menos de un mes el consejo consultivo que él creó dictamine sobre posibles cambios en la forma de elegir al procurador y la duración de su mandato.

Mientras tanto, el viernes pasado, la senadora de Pro Laura Rodríguez Machado dijo a la nacion que existirían otros candidatos promovidos por Cristina Kirchner y se refirió a Graciana Peñafort, directora de Asuntos Jurídicos del Senado. Peñafort, sin embargo, dijo a la nacion: “Nadie me lo ofreció, yo no lo quiero y creo que Rafecas va a ser un gran procurador”. Mientras tanto, en el oficialism­o hablan de un presunto plan para que la Procuració­n quede en manos del fiscal ante la Casación Raúl Pleé, un hombre de Comodoro Py a quien Miguel Pichetto impulsaba como procurador durante el macrismo. El supuesto plan consistirí­a en que el actual interino, Eduardo Casal, a quien el kirchneris­mo quiere sacar, lo nombrara “fiscal de distrito”, una figura que crea la nueva ley del Ministerio Público, que pone al fiscal de distrito más antiguo en la línea sucesoria para reemplazar al procurador en caso de vacancia. En el entorno de Pleé dicen que no es cierto que eso se esté planeando y que no existe ninguna posibilida­d cierta de que pueda pasar. Carlos Rívolo, presidente de la Asociación de Fiscales, dijo a la nacion que esa asociación siempre defendió “los dos tercios” y afirmó: “Necesitamo­s que la política se ponga de acuerdo, también se lo dijimos al gobierno anterior”. Por el momento, eso no parece cercano.

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