“Hemos perdido una batalla”, dijo Grabois, y apuntó al Gobierno
El dirigente cubrió de épica el revés judicial, llamó a “luchar” y criticó al Presidente, Kicillof y Bordet
Tras la decisión judicial que ordenó el “reintegro en forma inmediata” del predio tomado en Entre Ríos, el dirigente kirchnerista Juan Grabois difundió un mensaje en el que reconoció haber “sufrido una derrota”, se compadeció de Dolores Etchevehere –a quien señaló como una “víctima emblemática de violencia” en estado de “indigencia”– y apuntó también contra el presidente Alberto Fernández; el gobernador de Entre Ríos, Gustavo Bordet, y su par bonaerense, Axel Kicillof, por el desalojo de Guernica. “Dejen de ceder ante el poder fáctico”, dijo.
En su carta, Grabois no ahorró palabras para cubrir de épica el revés judicial de la toma. “Nos duele por el pueblo pobre que esperaba que una vez se dé vuelta la tortilla y que los poderosos vean un límite institucional a sus privilegios ilegítimos que prevalecen sobre los de las grandes mayorías”, postuló, luego de señalar a Dolores Etchevehere como la principal perjudicada por el fallo: “Nos duele por Dolores, víctima emblemática de la violencia de género intrafamiliar e institucional. Heredera de una fortuna inconmensurable, hoy está prácticamente en la indigencia”.
“Hemos perdido una batalla, una batalla en la larga lucha por la justicia social”, añadió Grabois, rostro visible del Proyecto Artigas, cuyos miembros se mantuvieron dentro del campo de los Etchevehere durante dos semanas, junto a Dolores Etchevehere, para implementar un proyecto de agricultura de tinte social y ecológico.
Grabois lo describió con otras palabras. “Nuestras vidas están consagradas a la causa del pueblo pobre y trabajador, a que los derechos sagrados a tierra, techo y trabajo”, dijo, para presentar la toma como una lucha entre la Constitución y los movimientos populares contra “la prepotencia del poder y su inmensa capacidad de corrupción y cooptación de las instituciones democráticas”.
“Llamamos a los pobres y a sus organizaciones, a la juventud que lucha, a la militancia ambiental y a la militancia consecuente del campo popular a no bajar nunca las banderas de soberanía política, independencia económica y justicia social; a luchar con las manos, la cabeza y el corazón por tierra, techo y trabajo”, pidió Grabois.
Integrante del Frente de Todos, al que suele tensionar con sus posturas, Grabois dio un paso más ayer, al apuntar directamente sobre Fernández, Kicillof y Bordet: “Les pedimos que dejen de ceder ante el poder fáctico”, les espetó. Pero fue más allá: asoció los desalojos de ayer con la violencia fascista y “un Estado pusilánime que nunca se les anima a las elites, pero que no duda en reprimir a los pobres”, así como con referentes “que quieren políticas neoliberales y represivas bajo el poncho del gobierno popular”.
“No es casual que este mismo día se haya realizado de manera intempestiva un desalojo represivo y violento sobre las tierras de Guernica. Cuánta razón tenía Picasso en su diálogo con los nazis sobre el famoso cuadro que representaba la violencia fascista sobre esa ciudad española. Al pintor le preguntaron: ‘¿Fue usted quien hizo esto?’ y él respondió: ‘No, a decir verdad, esto lo hicieron ustedes’. Esto se aplica hoy a nuestra Guernica con casillas destrozadas y personas humildes lastimadas, al cuadro patético de la miseria en la Argentina que parece no tocar fondo ni conocer las alternativas que ofrece nuestro gobierno”, dijo. Las palabras elegidas cayeron mal en la Casa Rosada.
Al final de la carta, Grabois anunció que los ocupantes dejarían la estancia a las 19.