Las apuestas deportivas como motor de innovación tecnológica
Las transmisiones deportivas están en la intersección exacta de modelos tradicionales y nacientes formas de consumo. Lo nuevo ya se asoma y lo viejo todavía no permanece. La tecnología ya permite que veamos un partido de fútbol en una tablet, que el “9” de nuestro equipo haga un gol y que en la pantalla aparezca una etiqueta que nos dirija a la compra directa de su camiseta con una oferta especial. Que no lo veamos con frecuencia no significa que no exista. De hecho, una compañía como Sportradar ya se lo ofreció al Borussia Dortmund dentro de la plataforma OTT que tiene el club alemán.
Javier Altamirano es director de innovación de Sportradar, compañía proveedora de los datos oficiales de NBA, NFL, ITF, NASCAR entre otras organizaciones. En el ciclo Masterclass2020 organizado por Sports Innovation Society, Altamirano describió como la personalización de la manera de ver el deporte y el crecimiento del mercado de apuestas en Estados Unidos, confluyen para generar las innovaciones más llamativas en este momento del deporte.
“Estamos yendo hacia una personalización de todo lo que hacemos. Ya todos tenemos claro que los “feeds” de cada uno en Facebook o en Twitter no son iguales. Lo que vos ves no es igual a lo que yo veo. Y los deportes norteamericanos como el béisbol o el futbol americano tienen una dinámica del estilo ´play by play´ que permite en esas pausas poder intentar predecir qué es lo que va a pasar. La mezcla de personalización de la experiencia y las predicciones que tienen naturalmente las apuestas hacen que muchas startups trabajen con algoritmos sobre esas dos condiciones: personalización y predicción”, cuenta Altamirano.
En ciertos ámbitos la sola mención de “apuestas deportivas” conlleva una carga negativa, a partir del profundo lado oscuro que puede tener la actividad: ludopatía, fraudes y las sospechas de arreglos de partidos aparecen al tope de las lógicas observaciones. NBA y NFL le encargan a Sportradar velar por la integridad de las competiciones. Las herramientas de inteligencia artificial les permiten detectar patrones extraños en el flujo de apuestas de eventos deportivos, advertir en tiempo real a las 600 casas de apuestas con las que trabajan en todo el mundo y suspender las operaciones cuando haya una sospecha fundada.
“Las soluciones tecnológicas pueden servir también para educar sobre estos asuntos. No todas las formas de apostar van directamente a las casas de apuestas”, comenta Altamirano. Una de las startups con las que trabaja Sportradar se llama Goodbookey, una aplicación que permite hacer apuestas deportivas entre amigos, pero derivando todas las ganancias a obras benéficas.
“El 80 por ciento de las apuestas suceden cuando se juega un partido. Un juego del Barcelona puede tener como resultado favorito 3-1, pero si van 70 minutos del partido y el marcado está cero a cero, o van 20 minutos del primer tiempo y ya están 2-2, habrá muchos movimientos en las apuestas que en ese caso ya irán por el 4-4 o el 5-3. Hay matemáticos que trabajan detrás de esos movimientos y por supuesto la inteligencia artificial para sostener esa predicción”, apunta Altamirano.
Sportradar anunció durante la pandemia el lanzamiento de una solución destinada a las organizaciones deportivas para ayudarlas a combatir el abuso y los “trolls” en las redes sociales y detectar el punto de origen del acosador anónimo. La herramienta funciona sobre el mismo “motor” que el análisis de los patrones extraños en las apuestas.